OMC: NOTICIAS 2009

Declaración del Presidente, Embajador Mario Matus

Deseo señalar al Consejo una comunicación de la delegación del Uruguay de fecha 28 de abril, distribuida con la signatura WT/GC/W/599, en la que se solicita que se incluyan en el orden del día de la reunión de hoy la fecha y lugar y la elección de la Mesa del séptimo período de sesiones de la Conferencia Ministerial.

Sugiero que abordemos estos dos temas a la vez e invito a la delegación del Uruguay a que haga la presentación de su comunicación.

(El Uruguay hizó una declaración.)

Los Miembros recordarán que la cuestión de la celebración de la próxima Conferencia Ministerial ha sido objeto de consultas por los sucesivos Presidentes del Consejo General desde diciembre de 2005, fecha en que los Ministros, en Hong Kong, pidieron que el Consejo celebrara consultas con miras a determinar la fecha y el lugar de celebración del séptimo período de sesiones.

En la reunión celebrada por el Consejo General en febrero de 2009, mi predecesor formuló una declaración sobre esta cuestión a raíz de las consultas que había mantenido, y sugirió que se necesitaba más claridad con respecto a los parámetros en torno a la celebración de un acto de ese tipo, antes de poder tomar una decisión.

Desde entonces, las consultas que he venido celebrando sobre esta cuestión han indicado una impresión firme y generalizada de que habría que celebrar una Conferencia Ministerial ordinaria este año, dado que ya han pasado casi cuatro años desde la última Conferencia Ministerial, que tuvo lugar en 2005. Quiero subrayar la palabra “ordinaria”, ya que también ha quedado patente que esa Conferencia no está destinada a ser una reunión de negociación: las negociaciones del PDD van por otra vía. Se trata sencillamente de cumplir el Reglamento de los períodos de sesiones de la Conferencia Ministerial adoptado por el Consejo General en enero de 1995. Este procedimiento, de acuerdo con el artículo IV del Acuerdo de Marrakech por el que se establece la OMC , dispone que “[l]os períodos ordinarios de sesiones de la Conferencia Ministerial se celebrarán por lo menos una vez cada dos años.”

En las consultas que he mantenido recientemente sobre este asunto, sugerí que el séptimo período de sesiones de la Conferencia Ministerial se basara en tres principios rectores que, en inglés, nos dan la sigla “FIT”: la participación plena, la no exclusión y la transparencia y que por este motivo, la Conferencia debería estructurarse en torno a sesiones plenarias en las que todos los Ministros pudieran participar por igual. Aparentemente esta idea recibió una aprobación general.

También parece existir un amplio acuerdo entre los Miembros en establecer un tema general que se examinaría en las sesiones plenarias y que los Ministros podrían abordar en sus declaraciones. También se han presentado ideas acerca de proporcionar subtemas para los debates de los Ministros y del formato en que podrían desarrollarse los debates sobre esos subtemas.

Teniendo en cuenta todas esas ideas, es evidente que estamos planeando un tipo de Conferencia Ministerial muy diferente a las que se han celebrado en los últimos años. Se trata de una Conferencia que pondrá el acento en la transparencia y el debate abierto, no en procesos basados en grupos reducidos y en estructuras de negociación informal. De esto se deduce también que no es necesario que el objetivo sea negociar una Declaración Ministerial, aunque naturalmente tendremos que considerar la forma más efectiva de consignar la sustancia de los debates de los Ministros y cualquier convergencia o conclusiones a las que puedan llegar.

A la luz de lo que extraje de mis consultas sobre estas cuestiones, el 11 de mayo distribuí el proyecto de Decisión que figura en el documento WT/GC/W/601. En este proyecto de Decisión se fijan las fechas para el séptimo período de sesiones (del 30 de noviembre al 2 de diciembre de 2009), el lugar de celebración (Ginebra) y el tema general. Las conversaciones que mantuve ulteriormente con las delegaciones indicaron la necesidad de revisar el tema propuesto, y tras celebrar nuevas consultas, ayer distribuí el documento WT/GC/W/601/Rev.1, en el que se propone como tema general: “La OMC, el sistema multilateral de comercio y el entorno económico mundial actual”. Este documento también está disponible fuera de la sala.

En el proyecto de Decisión también se encomienda al Presidente del Consejo General que adopte todas las disposiciones necesarias para preparar el séptimo período de sesiones en consulta con los Miembros y en colaboración con el Director General y las autoridades suizas.

A este respecto, quiero hacer referencia al segundo tema que nos ocupa hoy: la elección de la Mesa. El Reglamento de los períodos de sesiones de la Conferencia Ministerial dispone la elección de un Presidente y tres Vicepresidentes. Como se indica en la comunicación del Uruguay, los Ministros, en Hong Kong, pidieron al Consejo que celebrara consultas sobre esta cuestión, así como sobre la relativa a la fecha y el lugar. Estas solicitudes son totalmente acordes con la práctica seguida en los últimos tiempos, y en todas las ocasiones anteriores el Consejo primero ha adoptado una decisión sobre la fecha y el lugar, y luego, en una fecha ulterior, ha abordado la cuestión de la elección de la Mesa. A partir de las consultas que he celebrado hasta el momento, es evidente que esta última cuestión requiere una consideración más a fondo, y propongo que se la trate en las consultas que deben celebrarse en el marco del mandato impartido al Presidente del Consejo General en la decisión que tenemos hoy ante nosotros.

También en el marco de este mandato acometeré todos los aspectos de la organización del séptimo período de sesiones. Entre las cuestiones que se han planteado en las consultas que he celebrado hasta ahora (a las que acabo de referirme), pienso que la preparación del programa sustantivo influirá decisivamente en cómo habremos de preparar el formato y la logística de la Conferencia. Por consiguiente, esta cuestión es el punto de partida lógico para las consultas que mantendré con los Miembros en el futuro próximo. Estas consultas se llevarán a cabo en consonancia con nuestros principios de plena transparencia y de no exclusión, de modo que podamos preparar juntos el fondo y la logística del séptimo período de sesiones, de manera positiva y eficiente.

Antes de examinar este proyecto de Decisión, me gustaría destacar algunos aspectos.

Pienso que hay un amplio acuerdo en que, teniendo en cuenta el entorno económico mundial, esta Conferencia debería ser un acto mucho más austero y menos costoso que las anteriores. En la actual coyuntura, celebrar el tipo de Conferencia al que se han acostumbrado los Miembros no sólo sería inadecuado, sino que sin duda se vería como una extravagancia. Este apartamiento con respecto a pasadas Conferencias Ministeriales podría ayudarnos a establecer un nuevo modelo de reuniones a nivel ministerial que propicie el buen gobierno y un examen global de la OMC , y que no esté inextricablemente ligado a ninguna negociación en curso concreta.

Huelga decir que la celebración, regularmente cada dos años, de este tipo de reunión ministerial reducida, sencilla y mesurada, exigiría un cambio igualmente radical en el planteamiento de las delegaciones ante este evento, en particular en lo que respecta al número de los representantes de cada Miembro que asistirían.

En términos prácticos, sería una Conferencia de tres días de duración. La ceremonia de apertura tendría lugar el primer día por la tarde y las sesiones plenarias se celebrarían a lo largo de los dos días siguientes. Seguidamente, al término del tercer día, habría una breve ceremonia de clausura.

Como en ocasiones anteriores, la duración de las declaraciones de los Ministros estaría limitada, y todas las declaraciones constarían en las actas de la Conferencia Ministerial, con la posibilidad de distribuir en documentos otras declaraciones de mayor extensión cuando sea preciso. Como también se ha hecho en ocasiones anteriores, la lista de oradores se abriría con anterioridad, como es práctica habitual en las Conferencias Ministeriales.

El espacio físico disponible para la celebración de la Conferencia será inevitablemente más limitado que antes, lo que significa, como he sugerido antes, que los Miembros tendrán que aceptar limitaciones en ciertos aspectos, como el número de asientos en las diversas sesiones, el alojamiento en hoteles, etc. Por tanto, será conveniente para todos que las delegaciones no sean muy numerosas. A este respecto, debería tenerse muy presente la naturaleza de esta Conferencia: la reunión no está concebida como destinada a ser una reunión de negociación, sino una reunión ordinaria de los Ministros para participar en una evaluación más amplia del funcionamiento del sistema multilateral de comercio.

Tras la decisión de hoy sobre la fecha y el lugar del séptimo período de sesiones, iniciaré mis consultas lo antes posible. Como en ocasiones anteriores, la Secretaría distribuirá a su debido tiempo información sobre la logística y la organización de la Conferencia Ministerial.

(Después del debate, el Consejo General adoptó el proyecto de Decisión que figura en el documento WT/GC/W/601/Rev.1.)

> Si tiene problemas para visualizar esta página,
sírvase ponerse en contacto con [email protected], y proporcionar detalles sobre el sistema operativo y el navegador que está utilizando.