Cuestiones abarcadas por los Comités y Acuerdos de la OMC
EXÁMENES DE LA POLÍTICAS COMERCIALES: PRIMER COMUNICADO DE PRENSA, RESUMEN DEL INFORME DE LA SECRETARÍA Y DEL INFORME DEL GOBIERNO

Unión Aduanera del África Meridional (SACU) -Botswana, Lesotho, Namibia, Sudáfrica y Swazilandia-: abril de 1998

COMMUNICADO DE PRENSA
PRENSA/TPRB/72
16 de abril de 1998

UNOS ARANCELES MÁS SENCILLOS Y ESTABLES AYUDARÍAN A LOS MIEMBROS DE LA UNIÓN ADUANERA DEL ÁFRICA MERIDIONAL A LOGRAR VENTAJAS EN EL COMERCIO

Una estructura arancelaria simplificada y más estable incrementaría la eficiencia del comercio de la Unión Aduanera del África Meridional (SACU), mejoraría su capacidad para cumplir sus obligaciones multilaterales, facilitaría la negociación de acuerdos regionales nuevos o ampliados y ayudaría a los miembros de la SACU a atraer más inversiones extranjeras.

Una nueva serie de informes preparados por la Secretaría de la OMC sobre las prácticas y las políticas comerciales de los cinco miembros de la SACU -Botswana, Lesotho, Namibia, Sudáfrica y Swazilandia- señala que el arancel exterior de la SACU, hasta ahora determinado por Sudáfrica, es sumamente complejo y a menudo fluctuante, y a veces pone trabas a los intereses exportadores de algunos miembros de la SACU. La Secretaría de la OMC ha preparado informes individuales sobre las políticas y prácticas comerciales de cada uno de los miembros (véase más adelante para los aspectos más destacados). Los informes, junto con las declaraciones de políticas preparadas por cada uno de los cinco Gobiernos, serán examinados por el Órgano de Examen de las Políticas Comerciales de la OMC los días 21, 22 y 23 de abril de 1998. Desde que el mecanismo de examen de las políticas comerciales entró en vigor en 1989, es la primera vez que el GATT o la OMC han llevado a cabo un examen conjunto de varios países en desarrollo.

Según los informes de la Secretaría, el acuerdo de la SACU es el principal tratado por el que se rige la política comercial común de los países miembros de la unión aduanera. En cumplimiento del acuerdo, los miembros imponen a las importaciones derechos de aduana, impuestos indirectos y sobre las ventas y derechos antidumping, compensatorios y de salvaguardia, y les aplican otras leyes establecidas por Sudáfrica, que es, con mucho, el principal socio comercial de la unión aduanera. El acuerdo establece la franquicia arancelaria para la circulación de mercancías en el interior de la unión aduanera y reconoce los derechos de tránsito por todo el territorio del África Meridional. Los derechos ingresados por los miembros de la SACU se agrupan en un único fondo común que posteriormente es redistribuido por Sudáfrica a los miembros de la unión aduanera. Los informes señalan que el acuerdo se está actualmente renegociando, y que los miembros de la SACU están tratando de modificar la fórmula de redistribución de los ingresos fiscales y la administración de la propia unión aduanera.

El arancel exterior común de la SACU ascendía aproximadamente a un 15 por ciento de promedio en junio de 1997. El tipo arancelario es nulo para un 44 por ciento aproximadamente de las líneas arancelarias, especialmente para bienes de capital y productos que no se fabrican ni tienen sustitutos en Sudáfrica, mientras que los bienes producidos en Sudáfrica o con sustitutos producidos en este país están sujetos en general a tipos relativamente elevados. Los informes añaden que el arancel medio más alto se aplica al sector manufacturero, con un 15,6 por ciento, mientras que es el 5,6 por ciento en la agricultura y el 1,4 por ciento en la minería y la explotación de canteras. La estructura del arancel externo común, determinado por Sudáfrica, refleja más que nada las prioridades políticas y la estructura industrial de este país. Los informes señalan que la estructura arancelaria existente impone a veces un sesgo desfavorable a las exportaciones a las industrias de los Estados miembros. Los miembros de la SACU que no son Sudáfrica están también afectados por la complejidad del régimen arancelario de la unión aduanera, que comprende derechos específicos, ad valorem, mixtos, compuestos y derechos resultantes de la "fórmula", así como por sus frecuentes cambios. Ambos factores se citan como obstáculos para la aplicación y la administración del arancel.

No obstante, los informes señalan que el proceso de racionalización de los aranceles emprendido por Sudáfrica simplificará de manera sustancial la estructura arancelaria de la Unión Aduanera del África Meridional. Pero ese proceso de racionalización puede llevar a un aumento de la progresividad arancelaria y desembocar en una tasa de protección efectiva mayor que la actual.

Los cinco países miembros de la SACU son también miembros de la Comunidad de Desarrollo del África Meridional (SADC), acuerdo que establece un calendario para la creación de una zona de libre comercio en la que se implantaría la libertad de movimientos para los capitales, los bienes, los servicios y la mano de obra. La SADC, que va a poseer su propio mecanismo de solución de diferencias, es también un foro de cooperación política. Los miembros de la SADC, salvo Sudáfrica, gozan también de acceso preferencial a los mercados de la Unión Europea al amparo del Convenio de Lomé.

Según los informes de la OMC, la red de acuerdos regionales y preferenciales de comercio en el interior del área del África Meridional y entre el África Meridional y Europa presenta una serie de desafíos a los responsables políticos de la región. La SACU está todavía pendiente de definir su propia estructura, y a la vez tiene que abordar cuáles serán sus relaciones operativas con la SADC. Las relaciones de Botswana, Lesotho, Namibia y Swazilandia con Sudáfrica, por una parte, y las relaciones de Sudáfrica con la Unión Europea en el marco de un futuro acuerdo bilateral de comercio, por otra, constituyen un tercer elemento del complicado sistema regional y preferencial de comercio. Los informes señalan el riesgo existente de que la evolución de esta compleja serie de relaciones llegue a crear una estructura de aranceles, preferencias y normas de origen susceptibles de generar distorsiones del comercio en el futuro.

A continuación se presentan resúmenes de los puntos más destacados de los informes de la Secretaría de la OMC. Se pueden obtener copias de los informes en el sitio de la web de la OMC (bajo el epígrafe de Órgano de Examen de las Políticas Comerciales) o en la División de Información y Relaciones con los Medios de Comunicación de la OMC.

Informe de la Secretaría

ÓRGANO DE EXAMEN DE LAS POLÍTICAS COMERCIALES
UNIÓN ADUANERA DEL ÁFRICA MERIDIONAL (SACU)
Informe de la Secretaría - Observaciones recapitulativas

Sudáfrica

El Gobierno de Sudáfrica emprendió nuevas reformas económicas y comerciales tras el final del apartheid y la celebración de elecciones con pluralidad de partidos en 1994. Su economía está ahora reincorporándose rápidamente al sistema multilateral de comercio. El informe de la Secretaría de la OMC señala que el programa quinquenal de liberalización del comercio de Sudáfrica facilitará que sus productos compitan internacionalmente y proclama que los responsables políticos deberían proseguir su labor con planes para simplificar y coordinar los distintos aspectos de la política comercial, especialmente la estructura arancelaria.

El Gobierno sudafricano espera aumentar las inversiones y reorientar la asignación de recursos alejándose de la estructura industrial altamente intensiva en capital que caracterizó la economía durante gran parte de la época del apartheid. El informe dice que Sudáfrica ha hecho cambios decisivos adoptando una orientación hacia el exterior con un énfasis particular en la promoción de las exportaciones mediante una gran variedad de incentivos, tales como las concesiones arancelarias y las facilidades crediticias. El principal objetivo de la política económica de Sudáfrica consiste en dar más peso a los productos intensivos en mano de obra con miras a reducir el nivel de desempleo (29 por ciento de la población económicamente activa). Los principales instrumentos de política comercial previstos por Sudáfrica son los aranceles y una serie de medidas destinadas a influir en la oferta. Las restricciones cuantitativas han sido en gran parte eliminadas.

La minería y las actividades conexas siguen constituyendo el meollo de la economía sudafricana y suponen aproximadamente el 40 por ciento de los ingresos por exportación de mercancías. Como espina dorsal de la economía, el sector de la minería y de la explotación de canteras recibe la porción más grande de la ayuda financiera. El sector manufacturero, centrado en gran parte en la elaboración de minerales, aporta aproximadamente el 25 por ciento del PIB. No obstante, dice el informe, la competitividad internacional de la industria se resiente de una falta de mano de obra calificada. Este sector está protegido principalmente mediante aranceles, que alcanzan un promedio aproximado del 16 por ciento. Los textiles, el vestido y otros productos conexos figuran también entre los que reciben mayor protección arancelaria. Los servicios representan el sector con mayor número de empleos, aproximadamente la mitad de los del país, y aportan en torno al 53 por ciento del PIB. En el sector agrícola el Gobierno está promoviendo la desreglamentación del sistema de comercialización, sobre todo reduciendo el número de oficinas de control. Los aranceles para los productos agrícolas van del 0 al 35 por ciento, con una media aritmética del 5,6 por ciento. Los tipos consolidados máximos, que alcanzan hasta casi el 400 por ciento, dejan márgenes considerables para aumentos discrecionales de los aranceles que se aplican.

En los últimos años las importaciones de mercancías han crecido más deprisa que las exportaciones. Entre las exportaciones de Sudáfrica figuran maquinaria, vehículos automóviles y fertilizantes a países africanos, y productos minerales y agropecuarios a países desarrollados, principalmente Alemania, Italia, el Japón, el Reino Unido y los Estados Unidos. Los principales proveedores de importaciones a Sudáfrica son Alemania, el Japón, el Reino Unido y los Estados Unidos.

El informe señala que, si bien Sudáfrica privatizó o dotó de carácter comercial a una serie de empresas públicas a comienzos del decenio de 1990, este proceso se ha hecho más lento desde entonces. Varias empresas de titularidad estatal mantienen monopolios o ejercen un control mayoritario en varias áreas, como la electricidad, el agua, el transporte y las comunicaciones y la minería y explotación de canteras. En el sector agrícola funcionan todavía 14 oficinas de comercialización. En el sector de los servicios, aunque la situación ha mejorado con la reestructuración de varios proveedores de servicios de titularidad estatal y con una apertura a la inversión extranjera, una mayor liberalización contribuiría, según el informe, a aumentar la competitividad de las exportaciones de Sudáfrica.

Botswana

El crecimiento de Botswana desde la independencia en 1966 ha sido impresionante, debido en gran parte a los resultados del sector minero. El informe de la Secretaría de la OMC sobre la política comercial de Botswana afirma que la solidez de la estructura económica y exportadora de Botswana hace que este país sea el menos dependiente respecto de las redistribuciones de ingresos efectuadas por Sudáfrica entre los cuatro países menos desarrollados de la SACU. La liberalización de los servicios, es decir, las telecomunicaciones, las finanzas, los seguros y el transporte, contribuirá a que Botswana desarrolle su considerable potencial comercial. Entre tanto, el desarrollo de nuevas vías para el transporte a través del territorio de Namibia fomentará la diversificación del comercio. El informe indica que Botswana, dado su potencial, tiene un interés activo no sólo en reformar la estructura interna de la SACU, sino también en establecer un sistema arancelario que reduzca el actual sesgo desfavorable a la exportación y fomente una mayor apertura hacia el resto de la región del África Meridional y los demás países del mundo.

La principal partida del comercio de exportación de Botswana son los diamantes (aproximadamente el 70 por ciento de las exportaciones), de los cuales en torno al 70 por ciento van al Reino Unido y Suiza. El Reino Unido es también el mayor mercado para las exportaciones de carne de bovino de Botswana, que están sujetas a contingente en el marco de la UE y, por esta razón, gozan de acceso preferencial libre de derechos. En cuanto a las importaciones, Sudáfrica es con mucho el principal proveedor. No obstante, las importaciones de Sudáfrica incluyen mercancías de otras procedencias que pasan por Sudáfrica al ser Botswana un país sin salida al mar.

El informe señala que la actividad industrial ha crecido considerablemente, principalmente en los sectores de textiles y montaje de vehículos automóviles. En los servicios, el sector de telecomunicaciones ha crecido rápidamente. Los servicios de la banca se han abierto a nuevas formas de competencia y el turismo es una fuente potencial importante de divisas.

Lesotho

Lesotho, un país menos adelantado que constituye un enclave dentro del territorio de Sudáfrica y depende mucho de este país, es el miembro más pobre de la SACU. La agricultura de subsistencia es la principal ocupación de la mayoría de familias campesinas. El informe de la OMC señala que la mayor parte de los ingresos de estas familias procede de las remesas de los miembros de las mismas que han emigrado a Sudáfrica y trabajan allí por un salario. Esas remesas suponen aproximadamente el 30 por ciento del PNB –y casi el 45 por ciento del PIB- y más del doble de los ingresos por exportación registrados en 1996. El perfeccionamiento pasivo en el vestido y el calzado representa en torno a un tercio de los ingresos por exportaciones de mercancías. Los cobros procedentes del fondo común de los ingresos de aduana de la SACU suponen el 50 por ciento aproximado de los ingresos presupuestarios y más del 70 por ciento del gasto ordinario, la tasa más alta de todos los miembros de la SACU.

Al amparo del Convenio de Lomé, Lesotho tiene también acceso preferencial a la Unión Europea. Hasta fecha reciente, la industria del vestido era la principal beneficiaria de las preferencias de Lomé, pero sus posibilidades de exportación han quedado limitadas debido a los requisitos en materia de normas de origen. Lesotho tiene también acceso libre de derechos a los Estados Unidos al amparo del Sistema Generalizado de Preferencias (SGP) de este país. La mayoría de las exportaciones de vestidos y textiles a los Estados Unidos no están sujetas a restricciones contingentarias.

El informe de la OMC señala que el alto nivel de dependencia de Lesotho respecto de Sudáfrica en cuanto al comercio y a las remesas de los trabajadores emigrantes implica que para este país tiene considerable importancia disponer de una estructura estable y orientada hacia el exterior de los aranceles de la SACU. El desarrollo de la economía de Lesotho dependerá probablemente tanto de unas condiciones liberales para el comercio y la inversión en África Meridional como de la facilidad de acceso a otros mercados para sus exportaciones potenciales.

Namibia

Namibia tiene una economía muy dualista, con una tajante división entre el sector estructurado y el no estructurado. El informe de la OMC sobre Namibia afirma que el PIB del sector estructurado depende principalmente de la minería –diamantes y uranio- y la agricultura. La economía de Namibia depende mucho del comercio y sus ingresos aduaneros procedentes del fondo común de la SACU representan aproximadamente un tercio de sus ingresos fiscales. El valor de las exportaciones de minerales supone más o menos el 60 por ciento de las exportaciones totales, de las cuales el 40 por ciento corresponde a los diamantes. Según el informe, el aumento de ingresos procedentes de la exportación de diamantes y de otros minerales debería permitir que Namibia gozara de una mayor independencia económica dentro del área de la SACU. Al mismo tiempo, el comercio de Namibia se diversifica cada vez más en cuanto a productos y distribución geográfica a medida que progresa su desarrollo económico.

Namibia pertenece a la SADC, donde es responsable de coordinar las actividades pesqueras regionales, y también al Mercado Común para el África Meridional y Oriental (COMESA). No obstante, el informe señala que las únicas corrientes comerciales significativas con miembros del COMESA son las que tienen lugar con Zimbabwe, país con el cual Namibia mantiene un acuerdo preferencial de comercio. Al amparo del Convenio de Lomé, Namibia goza de un acceso preferencial, sujeto a restricciones contingentarias, al mercado de la UE para sus exportaciones de carne de bovino. Namibia goza también de acceso a la mayoría de los mercados de los países desarrollados gracias al SGP.

Namibia ha dado pasos para dotar de carácter comercial a antiguas empresas del Estado encargadas de tareas no pertenecientes al núcleo de las actividades gubernamentales y para aclarar las relaciones financieras entre el Gobierno y las empresas paraestatales a fin de que éstas puedan responder públicamente de su gestión. Hasta la fecha, los servicios postales y de telecomunicaciones, las instalaciones turísticas y los servicios de suministro de agua, que dependían de distintos ministerios del Gobierno, han sido o están siendo transferidos a compañías de titularidad estatal. No obstante, todavía no se ha adoptado ningún programa de privatización completa.

La participación de Namibia en la SACU y la SADC indica que este país tiene un interés claro por políticas comerciales orientadas al exterior. El continuo crecimiento de ingresos procedentes de la exportación de diamantes y otros minerales debería permitir que Namibia lograra una mayor independencia económica dentro del área de la SACU y reforzara su capacidad para luchar de manera autónoma, pero coordinada, por sus intereses.

Swazilandia

La economía de Swazilandia está atravesando un período de crecimiento económico más lento porque algunas de las empresas ubicadas en el país están volviendo a Sudáfrica. Durante el decenio de 1980, muchos negocios se trasladaron a Swazilandia para esquivar las sanciones económicas contra Sudáfrica, y la economía del país creció a una tasa media del 7 por ciento anual, frente a una tasa actual y a una tasa prevista para el próximo futuro del 3 por ciento. Las corrientes de inversión de capital también se han reducido significativamente.

El informe de la OMC sobre las políticas y prácticas comerciales de Swazilandia señala que sus principales socios comerciales son Sudáfrica y la Unión Europea. Sudáfrica ha sido el lugar de origen o de tránsito del 95 por ciento de las importaciones de Swazilandia y el destino del 58 por ciento de sus exportaciones. La UE recibe entre el 14 y el 20 por ciento de sus exportaciones, principalmente de azúcar, que goza de acceso preferencial a la UE al amparo del Protocolo de Lomé sobre el azúcar.

Según el informe de la OMC, Swazilandia ha exportado tradicionalmente productos agropecuarios y forestales. La industria alimentaria, la elaboración de bebidas y otras actividades manufactureras están creciendo y actualmente representan aproximadamente el 35 por ciento del PIB. Si bien las inversiones de capital en Swazilandia se redujeron durante los años noventa, ha tenido lugar una expansión significativa en las industrias existentes, como la fabricación de refrigeradores, la producción de pasta de madera y el refinado del azúcar.

El alto nivel de dependencia económica de Swazilandia respecto de Sudáfrica hace que tenga mucha importancia una estructura orientada hacia el exterior del sistema de aranceles de la SACU. El informe declara que la recuperación de la economía probablemente depende de que se implanten condiciones liberales para el comercio en el África Meridional y se facilite el acceso a otros mercados. Swazilandia, por consiguiente, tiene un interés activo en que se establezca un régimen de comercio exterior libre de todo sesgo desfavorable a las exportaciones que fomente la integración en el conjunto de la región del África Meridional y en el mercado mundial.

Nota para las redacciones

El Órgano de Examen de las Políticas Comerciales (OEPC) de la OMC examinará los informes de la Secretaría de la OMC, junto con las declaraciones preparadas por los Estados miembros de la SACU, los días 21, 22 y 23 de abril de 1998. El OEPC de la OMC realiza una evaluación colectiva de la gama completa de las políticas y prácticas comerciales de cada Miembro de la OMC a intervalos regulares, y sigue de cerca las tendencias y acontecimientos importantes que puedan tener consecuencias para el sistema mundial de comercio. Los informes, junto con una acta del debate del OEPC y el resumen del Presidente, se publicarán oportunamente y podrán obtenerse en la Secretaría de la OMC, Centro William Rappard, 154 rue de Lausanne, 1211 Ginebra 21.

Los informes abarcan la evolución de todos los aspectos de las políticas comerciales de cada uno de los Estados de la SACU, como las leyes y reglamentos nacionales, el marco institucional y las políticas comerciales por clase de medidas y por sectores. Desde que se constituyó la OMC, también abarcan los nuevos ámbitos del comercio de servicios y de los aspectos de los derechos de propiedad intelectual relacionados con el comercio. Los periodistas que deseen disponer del texto íntegro de los informes pueden solicitarlo a la Secretaría de la OMC. El texto íntegro del informe de la Secretaría de la OMC está también disponible para la prensa en el espacio dedicado a las noticias del sitio de la OMC en la web.

Desde diciembre de 1989 se han llevado a cabo los siguientes exámenes: Argentina (1992), Australia (1989 y 1994), Austria (1992), Bangladesh (1992), Benin (1997), Bolivia (1993), Brasil (1992 y 1996), Camerún (1995), Canadá (1990, 1992, 1994 y 1996), Chile (1991 y 1997), Colombia (1990 y 1996), Comunidades Europeas (1991, 1993, 1995 y 1997), Corea, Rep. de (1992 y 1996), Costa Rica (1995), Côte d'Ivoire (1995), Chipre (1997), Egipto (1992), El Salvador (1996), Estados Unidos (1989, 1992, 1994 y 1996), Fiji (1997), Filipinas (1993), Finlandia (1992), Ghana (1992), Hong Kong (1990 y 1994), Hungría (1991), India (1993), Indonesia (1991 y 1994), Islandia (1994), Israel (1994), Japón (1990, 1992, 1995 y 1998), Kenya (1993), Macao (1994), Malasia (1993 y 1997), Marruecos (1989 y 1996), Mauricio (1995), México (1993 y 1997), Nigeria (1991), Noruega (1991 y 1996), Nueva Zelandia (1990 y 1996), Pakistán (1995), Paraguay (1997), Perú (1994), Polonia (1993), República Checa (1996), República Dominicana (1996), República Eslovaca (1995), Rumania (1992), Senegal (1994), Singapur (1992 y 1996), Sri Lanka (1995), Sudáfrica (1993), Suecia (1990 y 1994), Suiza (1991 y 1996), Tailandia (1991 y 1995), Túnez (1994), Turquía (1994), Uganda (1995), Uruguay (1992), Venezuela (1996), Zambia (1996) y Zimbabwe (1994).