La declaración de los dirigentes emitida al término de la Cumbre contenía un decidido mensaje de apoyo a esta labor. Además de los dirigentes de las economías que suelen participar en las reuniones del G-7 (Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón, Reino Unido y Unión Europea), también estuvieron presentes los dirigentes de Etiopía, el Iraq, Liberia, Nigeria, el Senegal, Túnez y la Comisión de la Unión Africana.

El Director General Azevêdo dijo lo siguiente:

“2015 es un año importante para el sistema multilateral. Por lo que respecta al comercio, tenemos que apoyar el crecimiento y el desarrollo, haciendo avanzar las negociaciones sobre el Programa de Doha para el Desarrollo (PDD). Señalé a los miembros del G-7 que será un paso decisivo acordar un programa de trabajo de aquí a julio para que la Conferencia Ministerial de Nairobi resulte un éxito y en ella se obtengan resultados importantes, en especial para los países menos adelantados (PMA) Miembros. Quizás esta sea la mejor oportunidad que se nos haya presentado para concluir el PDD.

Aunque en los últimos meses se ha observado una gran participación de los Miembros de la OMC, me preocupa cada vez más el ritmo al que se está avanzando actualmente, en particular en esferas tan fundamentales como las de la agricultura, los productos industriales y los servicios. He dicho a los dirigentes del G-7 que será indispensable contar con voluntad política y liderazgo, y que ya se acerca la hora de tomar las grandes decisiones políticas.”

El Director General también insistió en la importancia de aplicar todas las decisiones adoptadas en Bali, en particular las que se refieren específicamente a cuestiones relacionadas con los PMA.

El Director General dijo que acogía con satisfacción los aspectos esenciales relativos al comercio que se abordaban en el comunicado, en especial el llamamiento a “… acordar rápidamente, a más tardar en julio, un programa de trabajo de la OMC posterior a Bali que permita la pronta conclusión de la Ronda de Doha con un resultado equilibrado”.

El comunicado decía a continuación lo siguiente:

“Debemos consolidar el éxito de la Conferencia Ministerial de 2013, que revitalizó el pilar de negociación de la OMC y puso de manifiesto que se puede ser flexible en el marco de consenso en el que opera la Organización. Aguardamos con interés los debates que se celebrarán en el ámbito del G-20 sobre cómo lograr que el sistema multilateral de comercio funcione mejor, sobre la base de las aportaciones de la OMC.”

El Director General agradeció además el firme apoyo del G-7 al Acuerdo sobre Facilitación del Comercio.

El Director General proseguirá esta semana en Ginebra sus consultas con vistas al logro de un acuerdo sobre el programa de trabajo para Doha a más tardar en julio.