OMC: NOTICIAS 2011

CONFERENCIAS MINISTERIALES: 8ª, GINEBRA 2011


“MC8” = Octava Conferencia Ministerial de la OMC, Ginebra 2011

> Conferencia Ministerial de 2011, Ginebra
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COBERTURA INFORMATIVA COMPLETA

 

ESTA NOTICIA tiene como finalidad ayudar al público a comprender los nuevos acontecimientos de la OMC. Si bien se ha hecho todo lo posible para asegurar que el contenido de la información sea exacto, ésta se entiende sin perjuicio de las posiciones de los gobiernos Miembros.

El Sr. Lamy destacó que en la OMC sólo los gobiernos Miembros pueden adoptar decisiones y puntualizó que las conclusiones a que llegara ese grupo los ayudarían a reflexionar sobre lo que la OMC debería hacer.

El Sr. Lamy hizo estas declaraciones en una sesión en la que un Ministro tras otro había manifestado que lamentaba que las negociaciones de la Ronda de Doha estuvieran estancadas, pero añadió que todos seguían comprometidos con el sistema multilateral de comercio de la OMC. Apenas unas horas antes un grupo de 42 Miembros de la OMC había convenido mejorar el Acuerdo sobre Contratación Pública.

"El sistema multilateral de comercio se halla en una encrucijada", dijo.  "En una economía mundial interconectada y en constante transformación, no puede permanecer inmóvil.  O avanza basándose en valores comunes y una mayor cooperación, o asistiremos a un retroceso del multilateralismo del que saldremos perdiendo.  No bastará con esperar a que lleguen tiempos mejores.  Ponernos de acuerdo en no hacer nada equivaldría a ponernos de acuerdo en aumentar nuestro sufrimiento."

El Sr. Lamy añadió que el grupo examinará lo que realmente mueve el comercio, los obstáculos con que se encuentra, su estructura y la forma de seguir transformando el comercio en desarrollo, crecimiento, empleo y reducción de la pobreza.

"En suma –terminó- debemos equipar a la OMC con las herramientas del siglo XXI"

 

El Presidente inaugura la reunión

El Ministro de Comercio e Inversiones de Nigeria, Excmo. Sr. Olusegun Olutoyin Aganga, que preside la Conferencia Ministerial, marca el tono de la reunión en su discurso inaugural.

La Conferencia Ministerial tiene lugar en un clima de dificultades económicas, dijo. "Son tiempos difíciles, y todavía no se vislumbra el final."

La OMC ha ayudado a los países a evitar una espiral proteccionista, lo que representa un importante mensaje que debe llegar a todo el mundo. Por eso, añadió, los Ministros de Comercio deben enviar también el claro mensaje de que la apertura del comercio es especialmente importante en estos tiempos económicos difíciles.

Instamos a los Miembros a que no renuncien a las negociaciones del Programa de Doha para el Desarrollo. El comercio es el motor del crecimiento, la creación de puestos de trabajo y el desarrollo, les recordó.

Los cuatro países que van a convertirse en nuevos Miembros de la OMC darán a esta Organización un carácter más universal e inclusivo, dijo.

La OMC no sólo sigue viva, sino que es capaz  de lograr resultados importantes para los pueblos de todo el mundo, concluyó.

Los Ministros que hicieron uso de la palabra plantearon cuestiones que preocupan a sus países. Por ejemplo, algunos destacaron la necesidad de  mantener el statu quo en las áreas de los obstáculos al comercio y las subvenciones (en otros términos, que no se eleven por encima de los niveles actuales), mientras otros argumentaron que sus países necesitaban un "margen de actuación" para afrontar sus actuales problemas económicos.

En general, sin embargo,  lamentaron que los Miembros no hubieran logrado llegar a un acuerdo en las negociaciones de la Ronda de Doha y manifestaron que seguían comprometidos con el multilateralismo, término que se utiliza para describir el sistema de acuerdos y compromisos entre los 153 Miembros de la OMC.

Durante el primer día hicieron uso de la palabra los siguientes oradores: el Presidente, el Sr. Lamy, el Embajador Yonov Frederick Agah, de Nigeria (Presidente del Consejo General), la Sra. Patricia Francis (Directora Ejecutiva del Centro de Comercio Internacional),

y ministros o jefes de las delegaciones de Singapur, Suiza, Estados Unidos, Qatar, México, Hong Kong, China, Chile, Unión Europea, China, Bangladesh, India, Kenya, Japón, Brasil, Arabia Saudita, Reino de la, Malasia, Australia, Indonesia, Trinidad y Tabago, Canadá, Noruega, Mauricio, Burkina Faso, República Dominicana y Turquía

Todas las declaraciones pueden consultarse acquí.

 

Declaración de apertura del Presidente:
Excmo. Sr. Olusegun Olutoyin Aganga, Ministro de Comercio e Inversiones de Nigeria

Es para mí un gran honor hacer uso de la palabra en este octavo período de sesiones de la Conferencia Ministerial de la OMC.  Quiero antes que nada agradecerles a todos por invitar a Nigeria a presidir esta Conferencia Ministerial.

Con alrededor de 167 millones de habitantes, Nigeria es el país más poblado de África.  Tiene aproximadamente 80 millones de hectáreas de tierras cultivables y 33 minerales sólidos en cantidad comercial.  Ocupa el séptimo lugar entre los productores de petróleo y el octavo lugar en cuanto a reservas de gas en el mundo.  Ha registrado un crecimiento medio de alrededor del 7 por ciento en los últimos 10 años, y es también la segunda economía más importante de África.  Todo esto hace que el comercio revista una importancia vital para nuestro pueblo y para el continente.  Nigeria cree firmemente en el sistema multilateral de comercio fuerte, equitativo, transparente, fiable y basado en normas que encarna la OMC, y en los beneficios que aporta ese sistema:  con arreglo a su plan oficial de desarrollo -Visión 2020- Nigeria se propone erigirse como una de las 20 economías más importantes del mundo.  Seguirá por eso contando con la previsibilidad y la seguridad que garantiza el sistema multilateral de comercio para alcanzar sus objetivos y realizar sus reformas en los ámbitos de la economía y el desarrollo.

Nuestra reunión ministerial tiene lugar una vez más en un clima económico mundial problemático, que ha empeorado en los últimos meses.  Son tiempos difíciles para la economía mundial y todavía no se vislumbrar el final.  Los niveles de deuda y la volatilidad de los mercados financieros están aumentando, al tiempo que persisten los bajos niveles de crecimiento.  Se ha desacelerado el comercio y han caído las corrientes de inversión extranjera directa y persisten también la volatilidad de los precios de los alimentos y los combustibles y los niveles elevados de desempleo.  La crisis económica resulta agravada por la percepción de que las respuestas políticas de los gobiernos han sido hasta ahora insuficientes para convencer a los mercados de que existen estrategias de salida dignas de crédito.  En pocas palabras, debemos reconocer que el mundo ha cambiado.  El entorno socioeconómico y político de 2001, cuando se inició la Ronda de Doha, es muy diferente del que existe actualmente, en 2011.

Es generalmente en situaciones económicas difíciles como ésta cuando crecen las presiones políticas para que se detenga o incluso se invierta el proceso de reforma económica y liberalización del comercio.  Todos sabemos que han aparecido indicios de proteccionismo en muchas partes del mundo.  La peor respuesta posible al reto que se nos presenta actualmente sería ceder ante esas presiones.

Como ha hecho a lo largo de los dos últimos años, el sistema de la OMC, con sus normas y sus compromisos, sigue ayudándonos a evitar una espiral proteccionista similar a la que se produjo como resultado de la crisis de los años treinta.  Este es un mensaje importante que es preciso hacer llegar a todo el mundo.  Sin embargo, lo que es aún más importante es que ustedes, los Ministros responsables del comercio, envíen el mensaje de que la apertura del comercio es especialmente importante en estos tiempos económicos difíciles.  Debemos tener siempre presente que en una economía globalizada todos resultamos afectados más rápidamente por los acontecimientos ocurridos en otros sitios, y que nuestros intereses comunes deben prevalecer sobre el nacionalismo económico.

Esta reunión ministerial nos brinda la ocasión de examinar la labor de la OMC en toda su amplitud.  Les brinda también a ustedes, los Ministros, la posibilidad de impartir una orientación política con respecto a la labor futura de la Organización en todos sus pilares.  Sabemos que se han hecho progresos significativos en las negociaciones de Doha, pero esas negociaciones están ahora estancadas.  No obstante, creo firmemente que no debemos renunciar a los objetivos que nos fijamos hace 10 años en Doha.  Creíamos entonces, y espero que sigamos creyendo hoy, que el comercio es el motor del crecimiento, de la creación de empleo, y que debe contribuir al desarrollo.  Es mi esperanza que durante las sesiones plenarias, y especialmente en las sesiones de trabajo sobre el PDD, ofrezcamos la orientación necesaria para asegurar que muy pronto puedan hacerse progresos reales en la Ronda.

Pero sabemos también que la OMC es algo más que la Ronda de Doha.  Por eso, esta Conferencia Ministerial es también una oportunidad para que los Ministros examinemos todos los aspectos del funcionamiento ordinario de esta Organización e intercambiemos ideas que nos ayuden a mantener nuestra Organización y sus normas actualizadas, de modo que siga siendo el centro del sistema multilateral de comercio.

La OMC tiene actualmente 153 Miembros y me complace muchísimo decir que uno de los resultados positivos de esta Conferencia será la ampliación de ese número cuando demos la bienvenida a cuatro nuevos Miembros:  Vanuatu, Samoa, la Federación de Rusia y Montenegro.  Nuestra Organización será así más universal e inclusiva y confirmaremos de ese modo que las adhesiones contribuyen decididamente al fortalecimiento del sistema multilateral de comercio.  Cuanto más universal sea su composición, más fuerte y más creíble será nuestra Organización.  Es por eso importante que sigamos prestando una mayor atención a los procedimientos de adhesión y me complace señalar que tenemos ante nosotros en esta Conferencia un proyecto de Decisión sobre las adhesiones de los PMA a la OMC.  Felicitamos y damos la bienvenida a nuestros nuevos Miembros.

Por último, el Consejo General ha remitido elementos de orientación política que abarcan tres temas amplios:  la importancia del sistema multilateral de comercio y de la OMC;  comercio y desarrollo;  y el PDD.  Los Ministros tendrán también oportunidad de exponer sus propias opiniones sobre estos temas durante nuestras sesiones de trabajo.  Además, se nos han remitido varias decisiones para que las adoptemos y tenemos ante nosotros informes de todos los órganos ordinarios de la OMC.  Nos esperan por tanto días de intenso trabajo y quiero dar las gracias al Director General Pascal Lamy y al Embajador Agah, Presidente del Consejo General, por su liderazgo y su dedicación en el proceso preparatorio de esta Conferencia Ministerial.  Confío en que al término de esta Conferencia hayamos demostrado al mundo no sólo que la OMC está viva, sino también que es plenamente capaz de lograr resultados importantes para los pueblos de todo el mundo;  resultados que generen crecimiento económico y fomenten el desarrollo, y que creen riqueza y empleos para nuestros pueblos.

Tras estas palabras, declaro abierto el octavo período de sesiones de la Conferencia Ministerial de la OMC.

 

WTO Director-General Pascal Lamy’s opening statement

Chairman Aganga
Ministers
Ms Francis
Ladies and Gentlemen

The year 2011 will be remembered for its turbulence and instability. When we thought we had turned the corner from the 2009 economic crisis, the outlook for the world economy seriously worsened. High volatility in financial markets and sovereign debt concerns have damaged business and consumer confidence. Global growth is stuttering across nations and, as a result, trade is slowing down. Unemployment remains at unacceptably high levels. The development gains made in recent years are disappearing. In the midst of this tempest citizens from across the globe have taken to the streets to demand stability, fairness, accountability. They are demanding solutions to address the challenges of our interconnected world.

As trade has contracted, the multilateral trading system has provided an anchor for national trade policies. It has helped moor them to our values of openness, non-discrimination, transparency and rule of law. But the strong storm waves are loosening the anchor and now risk dislodging it. This would be very bad news. The cost to the world economy of high intensity protectionism would be in the order of $ 800 billion, the estimated value of space or “water” in WTO commitments today.

By improving the credibility of the WTO, by ensuring it keeps moving forward, you have a contribution to make towards restoring global stability and predictability. A freer, fairer and more development friendly trading system is part of the solution. Exiting the crisis will be easier if it is done in the spirit of global co-operation. Going-it-alone will make it more painful and longer.

As I outlined in my recent letter to you, your work and achievements in the last two years has advanced the WTO agenda.

Just this morning the 42 parties to the Government Procurement Agreement reached consensus on a package of measures opening and modernising their procurement policies.

This week we will mark the arrival of four new Members of the WTO family, taking us to 157: Russia, Montenegro and two LDC Pacific Islands — Vanuatu and Samoa. It shows that adherence to multilateralism and its values remains high. These accessions also bring the WTO closer to universality.

Your work on Aid for Trade has firmly embedded trade capacity building as a necessary complement to global trade opening. As a result of the Third Global review last July, we now have an agenda for future work towards sustaining financing and showing concrete results.

You have also agreed improvements to the WTO monitoring functions which will be helped by the Integrated Trade Intelligence Portal which we are launching today.

A large number of highly complex disputes are being resolved peacefully, without resorting to uncontrolled retaliation, reminding us of the uniqueness and value of the WTO Dispute Settlement System.

But, so far, you have failed in your endeavours to amend the WTO rule-book to make global trade fairer and more open. The Doha Development Round is at an impasse. At the same time the number of bilateral and plurilateral trade agreements keeps rising, demonstrating that the benefits of trade opening are not in question. How do we explain this paradox?

Some say that bilateral deals provide a faster route to trade opening as they allow participants to omit the most politically difficult issues such as agriculture and fisheries subsidies, anti- dumping rules or tariff peaks. Some argue it is easier to conclude deals when you can pick and choose your partners. For others, this proliferation is more driven by geopolitics than by economics.

Be that as it may, it is time Members of the WTO face up to the reality of this growing contradiction. We can no longer bury our head in the sand. We need to understand the root causes of our inability to advance multilateral trade opening and a regulatory agenda, and to build a collective response. Blaming others will not help.

You will need to address the essential question behind the current impasse: different views as to what constitutes a fair balance of rights and obligations within the trading system, among Members with different levels of development. What is the right share in the contributions and aspirations of advanced economies and emerging markets. What is the right combination of reciprocity among trade partners with similar levels of development and flexibility, which would provide weaker Members with space to adjust to greater competition. It is clear that progress in multilateral trade negotiations, as in climate change negotiations, will require a political response to this political question.

All of you believe that this should be done step-by-step, gradually moving forward the parts of the Doha Round which are mature, and re-thinking those where greater differences remain. But to be credible, this needs to be translated, sooner rather than later, into an operational work plan.

But in my view this is not enough. We also need to look at the real drivers of today’s and tomorrow’s world trade, at today’s and tomorrow’s obstacles to trade, at today’s and tomorrow’s trade patterns, at how to keep transforming trade into development, growth, jobs and poverty alleviation. In sum, we must equip the WTO with XXI century software.

In order to facilitate this discussion, in 2012 I will be convening a “panel of multi-stakeholders of the WTO” to analyse all these elements and report to the entire Membership by the end of next year. I believe this can provide a useful contribution to your own reflections in what is, and should remain, a Member-driven Organization.

Mr Chairman, ladies and gentlemen,

The multilateral trading system is at a crossroads. In an interlinked world economy in constant transformation, it cannot stay put. Either it advances in the spirit of shared values and enhanced co-operation, or we will face a retreat from multilateralism, at our own peril. Waiting for better times will simply not suffice. A consensus for inaction would simply mean a consensus for more pain for all.

My call today is for all of us to stand up for the values of multilateralism. For major players to exercise leadership and to muster political courage to act together for greater trade opening and reform. To place the interests and needs of developing countries and, in particular, those of the poorest, at its heart. And to start thinking seriously about the dire consequences of not doing so in the midst of a worsening crisis. To act now in favour of a stronger multilateral trading system tomorrow.

Thank you for your attention.

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