El Foro Público es la principal actividad anual de divulgación de la OMC y constituye una plataforma excepcional que reúne a parlamentarios, representantes de las principales empresas internacionales, estudiantes, profesores universitarios y organizaciones no gubernamentales para debatir sobre una amplia gama de cuestiones relativas a la OMC y algunos de los principales asuntos de actualidad en el ámbito del comercio y el desarrollo.

Más de 2.500 participantes se han inscrito para asistir al Foro de este año, que tiene por tema "El comercio en 2030". Se han programado más de 100 sesiones para examinar cómo será el comercio sostenible en 2030 y más adelante, a través de subtemas centrados en el comercio sostenible, el comercio facilitado por la tecnología, y la creación de un sistema de comercio más inclusivo.

El Director General Roberto Azevêdo señaló que los rápidos cambios que se están produciendo actualmente, desde la aparición de nuevas tecnologías al aumento de los riesgos ambientales, nos obligan a replantearnos el concepto que tenemos del comercio. Si se aplican las políticas adecuadas, la revolución tecnológica podría contribuir a impulsar un crecimiento considerable del comercio. Al mismo tiempo, se prevé que las nuevas tecnologías provocarán alteraciones importantes en el mercado mundial del empleo, pues desaparecerán y se crearán decenas de millones de puestos de trabajo en los próximos años.

El Director General indicó que "cada vez se realizarán más operaciones comerciales a través de plataformas digitales". "Aparecerán nuevas formas de entregar los productos. Se crearán nuevos tipos de servicios. Por tanto, la pregunta que debemos hacernos es si el actual sistema mundial de comercio está preparado para responder a este nuevo entorno".

"Creo que los principios fundamentales consagrados en los Acuerdos de la OMC siguen siendo válidos: la importancia de tener normas claras, la apertura, la cooperación y la no discriminación", declaró.

El Director General Azevêdo añadió que sigue pendiente la cuestión de si el sistema de normas actual es suficiente para afrontar los cambios. Si no se actualizan periódicamente dichas normas, existe el riesgo de acentuar las disparidades entre esos principios básicos y la evolución de los hábitos, los comportamientos e incluso los valores éticos.

"Debemos emprender la senda que nos permita mejorar el comercio mundial de aquí a 2030, para lograr un comercio aún más sostenible e inclusivo", afirmó. "No podemos dejar el progreso en espera hasta que estemos listos. Tenemos que empezar a hablar ahora. Tenemos que implicarnos". Su discurso completo puede consultarse aquí.

Los oradores que intervinieron en la sesión plenaria inaugural destacaron la importancia de la innovación y la flexibilidad para adaptarse al nuevo entorno comercial mundial, así como de adoptar las políticas adecuadas que fomenten la innovación y faciliten el logro de los objetivos de sostenibilidad e inclusión.

Erik Solheim, Director Ejecutivo del PNUMA, resaltó la importante función que desempeña el comercio para apoyar al desarrollo sostenible, en particular al haber contribuido a reducir de forma considerable la pobreza en el mundo en los últimos años y al haber fomentado un mayor uso de las energías renovables y las tecnologías conexas.

"El año pasado tuvimos en la red mundial más electricidad generada únicamente por la energía solar", señaló el Sr. Solheim. "¿Podría haber ocurrido esto sin el comercio? No. Tal vez el sector diera sus primeros pasos en California y Alemania, pero ha adquirido tales dimensiones en los enormes mercados de China y la India que ya puede competir con los precios del carbón en todo el mundo".

"Este cambio hubiera sido imposible sin el comercio".

Jack Ma, Director Ejecutivo y cofundador del Grupo Alibaba, líder mundial del comercio electrónico, ofreció un pronóstico halagüeño para el comercio, que estará impulsado por el comercio electrónico, las pequeñas empresas y los servicios. Instó a la audiencia del Foro a tener confianza en el futuro.

"Dejemos de preocuparnos por el futuro", declaró. "Tal vez no tengamos las soluciones, pero los jóvenes nos las ofrecerán. Puede que no dispongamos de la solución hoy, pero la tendremos mañana".

Según sus previsiones, en 2030 se observará un aumento considerable del volumen de operaciones comerciales realizadas en línea, una mayor participación de las pequeñas empresas en el comercio electrónico y un mayor número de transacciones de consumidor a empresa.

"Las menciones actuales 'Fabricado en China' o 'Fabricado en Suiza' se convertirán en 'Fabricado en Internet' en 2030", señaló. "Todos estos cambios modificarán radicalmente nuestra manera de comerciar, pero no cabe duda de que la mayoría de las empresas saldrán beneficiadas y de que se crearán muchos más empleos de los esperados".

Laura Behrens Wu, Directora General y cofundadora de Shippo, una plataforma de expedición de múltiples transportistas, dijo que entre las grandes ventajas del nuevo mundo del comercio figurarán la disminución de los costos de entrada para los empresarios y la desaparición de los límites geográficos del comercio.

"Nunca ha sido tan fácil poner en marcha una empresa en línea", añadió la Sra. Behrens. "No se requiere una ubicación física ni demasiados activos, y el personal puede concentrarse en lo que mejor sabe hacer: fabricar productos bonitos y creativos, atender a los clientes y estar al tanto de las tendencias".

"Se dice que no podemos detener la tecnología. Yo no quiero detener la tecnología. Las personas están aprovechando las tecnologías para ser más creativas y para poder establecer más conexiones humanas a fin de acortar las distancias entre ellas".

Tunde Kehinde, cofundador de Lidya, una importante plataforma para conceder préstamos a pequeñas y medianas empresas en los mercados emergentes, dijo que la obtención de financiación asequible era un factor decisivo para que esas empresas pudieran participar en el comercio y aprovechar las oportunidades que ofrece el acceso a los mercados mundiales.

"En consonancia con los objetivos de desarrollo sostenible, en relación con la creación de empleo y la igualdad, el hecho de que ahora se pueda ofrecer (a las pequeñas empresas) la financiación necesaria para poder satisfacer las exigencias de los compradores realmente les abre las puertas de mercados a los que antes no podían acceder".

El Sr. Kehinde instó a las pequeñas empresas a dialogar con los Gobiernos y a defender la creación de un entorno empresarial que les ayude a aprovechar las nuevas tecnologías y a desarrollarse.

"Si no se sientan a la mesa, se encontrarán con la dificultad de que se adopten normativas sin tener en cuenta su opinión. Esas normativas pueden resultar muy perjudiciales, y será difícil revertir la situación".

Christine Bliss, Presidenta de la organización estadounidense Coalición de Industrias de Servicios (CSI), señaló que los proveedores de servicios tienen un futuro prometedor en el nuevo entorno comercial impulsado por la tecnología. No obstante, a los miembros de la CSI les preocupan algunas de las tendencias actuales de la normativa, que amenazan con entorpecer este progreso.

"Las peticiones de que se establezcan prescripciones en materia de localización y procesamiento de datos plantean un problema considerable y pueden poner en peligro la prestación eficiente y rentable de servicios transfronterizos", declaró la Sra. Bliss. "La presión para que se impongan derechos de aduana a las transmisiones electrónicas es otro gran obstáculo que, si no se aborda correctamente, podría deteriorar gravemente las condiciones del comercio electrónico transfronterizo".

"Los riesgos en relación con la ciberseguridad y la reacción excesiva de los Gobiernos son otras de las esferas que deben abordarse. Es necesario desarrollar marcos de cooperación para tratar estas cuestiones con cautela. Y los límites de los compromisos de acceso a los mercados de servicios también son restrictivos. Estamos presionando para eliminarlos y necesitamos encontrar nuevas formas de avanzar".