DIRECTOR GENERAL ADJUNTO ALAN WM. WOLFF

A continuación figura el texto de su intervención.

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Reunión virtual del Grupo Informal de Gobiernos en Proceso de Adhesión a nivel de Jefes de Delegación

Embajador Yury Ambrazevich (Belarús),
Jefes de Delegación de los Gobiernos en proceso de adhesión,
Negociadores Jefes que participan desde sus capitales,
Buenos días:

Es para mí un placer estar hoy aquí con ustedes. Gracias por esta invitación.

Ha pasado poco más de un año desde la última vez que me dirigí a este Grupo. Es un eufemismo decir que el mundo ha cambiado dramáticamente desde entonces. La escala, magnitud y ritmo de los cambios no tiene parangón en la memoria reciente. El mundo ha perdido y sigue perdiendo miles de vidas preciosas, y hay millones de personas infectadas por un virus cuya naturaleza aún no es del todo conocida. Las consecuencias de la pandemia y las medidas adoptadas para combatirla se traducirán en una fuerte desaceleración de la economía mundial.

Los desafíos comunes obligan a dar prueba de resistencia y creatividad y a mostrar empatía. La pandemia de COVID-19 debería generar un fuerte sentido de interconexión entre las naciones. Debemos mostrar que las naciones tienen un gran potencial de actuación colectiva.

Me gustaría centrar mis observaciones de hoy en dos aspectos generales: i) la pandemia de COVID‑19, la integración comercial y las adhesiones; y ii) los valores del sistema multilateral de comercio: pasado, presente y futuro. Por supuesto, estaré encantado de intentar responder a cualquier pregunta que deseen formular acerca de la visión que tiene la OMC sobre los acontecimientos actuales y las perspectivas futuras.

La pandemia de COVID-19, la integración comercial y las adhesiones

La pandemia de COVID-19 es una preocupación mundial y requiere una respuesta mundial eficaz, una respuesta multilateral. La pertenencia al sistema multilateral de comercio es hoy más esencial que nunca. No responder a los retos que plantea la pandemia no es una opción viable. Nuestro objetivo común es la participación de los Miembros en el sistema multilateral de comercio, que es lo que les permitirá estar en mejores condiciones de afrontar la actual crisis sanitaria y económica y recuperarse de ella.

En todo el mundo, los países se están dedicando a examinar las repercusiones de la COVID-19 en la salud pública, así como en la economía nacional y mundial. Aunque es comprensible que los Gobiernos se centraran en un principio en ellos mismos y en las repercusiones internas, muchos Miembros de la OMC que están preparándose para pasar a la fase de recuperación de la gran contracción económica están convencidos de que la cooperación internacional es de vital importancia.

Es fundamental que los Gobiernos en proceso de adhesión participen en la respuesta multilateral a la crisis provocada por la pandemia.

Aunque la respuesta de los Gobiernos a esta crisis no ha sido uniforme, es alentador ver que el programa de integración comercial no se ha dejado de lado durante la pandemia. Los Estados miembros de la UE han dado luz verde al inicio de las negociaciones de adhesión a la UE con dos pequeños países balcánicos (Macedonia del Norte y Albania). En África, hay cada vez más voces que reclaman el establecimiento de la Zona de Libre Comercio Continental Africana (AfCFTA) como el mejor estímulo posible para la recuperación económica posterior a la COVID, si bien su puesta en marcha, inicialmente prevista para julio de 2020, se ha postergado. En la OMC, a pesar de la crisis, seguimos avanzando en el programa de adhesiones.

Son muchos los Gobiernos en proceso de adhesión que siguen participando de forma activa, por separado pero también colectivamente, por ejemplo a través de este Grupo.(1) Considero alentador el diálogo activo que están manteniendo los Gobiernos en proceso de adhesión con Miembros destacados, Presidentes de los grupos de trabajo y la Secretaría para avanzar en sus respectivos procesos de adhesión, a pesar de las dificultades que todos ellos afrontan debido a la doble emergencia sanitaria y económica provocada por la pandemia. En particular, celebro los progresos concretos realizados por algunos Gobiernos, sobre todo de Eurasia y de varios PMA, para presentar la documentación relativa a la adhesión y preparar las reuniones de sus respectivos Grupos de Trabajo. 

En concreto:

  • Belarús y Uzbekistán ya habían presentado toda la documentación antes del inicio del confinamiento. Sus representantes han expresado en repetidas ocasiones su deseo de celebrar sus reuniones lo antes posible, incluso por medio de una plataforma virtual.
  • Somalia presentó su Memorándum sobre el régimen de comercio exterior a finales de abril, y en estos momentos estoy tratando de asegurar el nombramiento de un Presidente para el Grupo de Trabajo.
  • Timor-Leste presentó a mediados de mayo la primera serie de respuestas a las preguntas de los Miembros sobre su Memorándum, así como su Plan de Acción Legislativa y su legislación conexa, allanando el camino para la primera reunión del Grupo de Trabajo, que se celebrará, esperemos, en julio.
  • Por lo que respecta a Azerbaiyán y las Comoras, la Secretaría se ha puesto en contacto con los equipos técnicos a fin de ultimar los proyectos de informe que servirán de base para las reuniones de sus respectivos Grupos de Trabajo.
  • Por último, hemos recibido la solicitud de Turkmenistán para que se le reconozca la condición de observador. Esperamos que los Miembros de la OMC examinen esta solicitud en la próxima reunión ordinaria del Consejo General, prevista para los días 22 y 23 de julio. 
    • Se trata de una solicitud histórica, ya que Turkmenistán es la última de las 15 antiguas repúblicas soviéticas en tratar de establecer una relación oficial con la OMC, que comenzó inmediatamente después de la disolución de la Unión Soviética, en 1991. 
    • Esta solicitud, junto con la presentada por Curazao, cuyo Grupo de Trabajo se estableció justo antes del confinamiento, supone un voto de confianza en el sistema multilateral de comercio a pesar de los desafíos existentes.

Sé que otros Gobiernos en proceso de adhesión están trabajando con la misma intensidad. Su compromiso con el sistema multilateral de comercio y su dedicación al proceso de adhesión aportan mucha energía a la OMC en este período difícil.

El edificio de la OMC abrirá sus puertas para celebrar reuniones a partir del 15 de junio, bajo ciertas normas sanitarias, y espero con interés la reanudación de las reuniones de los Grupos de Trabajo sobre la Adhesión.

También celebro las contribuciones de los Gobiernos en proceso de adhesión al proceso de notificación de las medidas relacionadas con el comercio(2), así como su reciente participación en la reunión extraordinaria del Consejo General sobre la pandemia de COVID-19.(3) Están ustedes ejerciendo los derechos que le corresponden en calidad de observadores y sus opiniones están siendo escuchadas.

El valor de la OMC: pasado, presente y futuro 

Cuando el año pasado me dirigí al Grupo, dije lo siguiente: “Vivimos tiempos apasionantes. Sus Gobiernos no deben perder la oportunidad de desempeñar su papel en el esfuerzo de dar forma al sistema multilateral de comercio”. Esto es hoy más cierto que nunca.

En una declaración reciente, enumeré 16 principios y valores que han regido o previsiblemente regirán el sistema multilateral de comercio. Empecé con la paz, una causa que toca muy de cerca a muchos de los Gobiernos en proceso de adhesión y un elemento fundamental de la iniciativa Comercio para la Paz. A continuación mencioné la estabilidad (certeza), el estado de derecho, el bienestar, la igualdad, la no discriminación, la soberanía, la universalidad, el desarrollo, la transparencia, la sostenibilidad, las fuerzas del mercado, la convergencia, la reciprocidad, la cooperación internacional y la ética. En realidad, la lista estaba incompleta, porque la OMC también se ocupa del equilibrio entre derechos y obligaciones, y entre la liberalización y la disponibilidad de medidas comerciales correctivas.

Nadie aprecia mejor los valores y el valor de la OMC que aquellos que aspiran a incorporarse al sistema. El hecho de que estén ustedes trabajando con esta finalidad debería permitirles apreciar mejor estos principios. Esta es una de las razones por las que ustedes, con su defensa del sistema multilateral de comercio, son un elemento indispensable para el futuro.

¿Cómo podemos avanzar desde el presente, plagado de dificultades e incertidumbres, hacia el futuro? Permítanme compartir algunas reflexiones sobre qué podrían hacer los Gobiernos en proceso de adhesión para ayudar a forjar la OMC 2.0.

  • En primer lugar, seguir avanzando en las negociaciones sobre la adhesión. Durante los últimos 25 años, las adhesiones a la OMC han reforzado sistemáticamente el sistema multilateral de comercio, ampliando el ámbito de aplicación de los Acuerdos de la OMC a más del 98% del comercio mundial y, a menudo, profundizando y actualizando las normas y disciplinas vigentes. Las adhesiones a la OMC están en la vanguardia de la reforma de la OMC, ya que han estimulado a menudo el debate sobre la elaboración de normas en el plano multilateral, como es evidente en las esferas de la facilitación del comercio, las disciplinas sobre los contingentes arancelarios y las subvenciones a la exportación.
  • En segundo lugar, digitalizar el proceso de adhesión. La pandemia ha dificultado los desplazamientos y es probable que anime a reconsiderar la necesidad de celebrar tantos encuentros presenciales, ya sea para las reuniones de los grupos de trabajo, las negociaciones bilaterales sobre el acceso a los mercados, las actividades de formación o las visitas de la Secretaría o los Presidentes de los Grupos de Trabajo a los Gobiernos en proceso de adhesión. La cara positiva de los últimos meses de confinamiento ha sido el descubrimiento de las plataformas virtuales, que no solo pueden ser rentables, sino resultar además muy eficaces para establecer contacto con las diferentes partes interesadas, nacionales o internacionales. Las plataformas virtuales pueden aumentar la transparencia y la inclusión, mejorando el proceso de adhesión. Esta reunión virtual es una buena prueba de esas posibilidades. 
    • La División de Adhesiones tiene previsto organizar entre el 29 de junio y el 3 de julio una “Semana sobre las adhesiones” virtual en la que podrán participar todas las partes interesadas en las adhesiones. Durante esta actividad de una semana de duración se celebrarán diez (10) seminarios en línea de 90 minutos de duración en los que se ofrecerá formación sobre las negociaciones de adhesión; mesas redondas con negociadores jefes, Presidentes de grupos de trabajo y asociados; y sesiones centradas en distintas regiones, como Eurasia, África/PMA y la región árabe. Esperamos seguir colaborando a través de estos encuentros virtuales.          
  • En tercer lugar, seguir contribuyendo al ejercicio de transparencia de la OMC, que es uno de sus pilares fundamentales, compartiendo con los Miembros de la OMC las medidas relacionadas con el comercio, ya sean restrictivas o liberalizadoras. De hecho, la página web dedicada a la enumeración de esas medidas comerciales no distingue entre Miembros y observadores.  
  • En cuarto lugar, considerar la posibilidad de participar en las iniciativas conjuntas sobre el comercio electrónico, las mipymes y la facilitación de las inversiones. Sé que algunos Gobiernos en proceso de adhesión ya lo están haciendo. Aunque las iniciativas conjuntas tienen actualmente un formato plurilateral, son iniciativas abiertas en las que también pueden participar los Gobiernos en proceso de adhesión.
  • En quinto lugar, considerar la posibilidad de copatrocinar las propuestas y declaraciones de los Miembros sobre la COVID-19 y el comercio mundial, que actualmente son las siguientes: i) la declaración sobre el comercio abierto y previsible de productos agropecuarios y alimenticios (encabezada por el Canadá); ii) la declaración sobre la COVID-19 y el sistema multilateral de comercio formulada por los Ministros encargados de los asuntos relacionados con la OMC (encabezada por Suiza); iii) la declaración sobre la importancia de las mipymes; iv) la declaración sobre el comercio de bienes esenciales para combatir la pandemia de COVID-19 (presentada por Nueva Zelandia y Singapur); y v) una declaración sobre una serie de medidas concretas para hacer frente a esta pandemia (presentada por Corea). 
  • En sexto lugar, apoyar la Duodécima Conferencia Ministerial (CM12) que Kazajstán se ha ofrecido a acoger en junio de 2021 en Nursultán. Aún no se ha adoptado la decisión definitiva sobre cuándo y dónde se celebrará. El asunto se tratará en la reunión de julio del Consejo General. Kazajstán era recientemente uno de ustedes. Como Miembro recientemente incorporado (en 2015) a la OMC, ha mostrado su liderazgo, realizando contribuciones a un sistema al que tardó casi 20 años en adherirse. La CM12 ofrece una oportunidad histórica para demostrar que la Organización puede satisfacer las crecientes necesidades de sus Miembros en diversas esferas, incluidas las disciplinas relativas a las subvenciones a la pesca. 

Estamos en un momento de transición hacia un nuevo Director General. Creo que habrá un abanico importante de candidatos sólidos para ocupar el cargo. Es tranquilizador ver que existen personas destacadas y con talento dispuestas a asumir esta tarea.

El viernes participé en una investigación legislativa del Comité de Comercio Internacional de la Cámara de los Comunes del Reino Unido sobre la pandemia de COVID-19 y el sistema multilateral de comercio. Los miembros de ese Comité mostraron un gran interés y apoyo por el futuro de la OMC. Mañana seré entrevistado para el Foro Económico de Delfos (Grecia), donde también hay un gran interés en la OMC y el comercio mundial. Una de las cosas que propondré mañana es la realización de un examen sustantivo de la OMC en relación con esta transición, a fin de determinar qué cambios deben hacerse en el marco de la reforma de la OMC y qué aspectos es necesario preservar y fortalecer.

La reforma de la OMC es un asunto que nos preocupa a todos. Una idea que he examinado con varios grupos es la posibilidad de asignar a los Miembros y a la Secretaría de la OMC una función diferenciada de planificación de políticas para anticipar futuras necesidades del sistema multilateral de comercio. Esta facultad mejoraría la capacidad de respuesta del sistema multilateral de comercio, haciéndolo más resistente en tiempos de crisis como los que estamos experimentando actualmente a consecuencia de esta pandemia y preparándolo para afrontar las oportunidades y tensiones que generan en el comercio internacional las nuevas tecnologías.

La OMC está lejos de haber superado todas las pruebas. Los desafíos existirán siempre. Los Gobiernos en proceso de adhesión son un indicio fundamental de la importancia de los valores y principios subyacentes del sistema multilateral de comercio. Ustedes ofrecen al sistema una gran esperanza de futuro.

 


Notas

  1. La División de Adhesiones se reunió con el Grupo Informal de Gobiernos en Proceso de Adhesión el 30 de abril y con el Grupo g7+ sobre Adhesiones a la OMC el 20 de mayo. Volver al texto
  2. Argelia, Azerbaiyán, Belarús y Serbia. Volver al texto
  3. Bahamas, Belarús, Libia y Uzbekistán intervinieron en la reunión del Consejo General en sesión específica celebrada el 15 de mayo. Volver al texto

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