AGRICULTURA

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La Embajadora Abraham Peralta comunicó a los participantes en la reunión que la Directora General Ngozi Okonjo-Iweala ha propuesto un proceso informal de tres vías centrado en: una declaración sobre la seguridad alimentaria como respuesta inmediata a los desafíos actuales; una propuesta de Decisión Ministerial que eximiría de las restricciones a la exportación las compras de alimentos realizadas por el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y un resultado que orientaría las negociaciones sobre todos los temas relacionados con la agricultura después de la Conferencia Ministerial.

Según la Presidenta, un resultado sobre la agricultura ayudará a hacer frente a las crisis actuales

La Presidenta indicó que la DG Okonjo-Iweala sigue decidida a lograr que la obtención de un resultado sobre la agricultura en la CM12 contribuya a mejorar la seguridad alimentaria y la nutrición, y que recientemente ha mantenido dos reuniones informales para estudiar formas de hacer avanzar las conversaciones. La Presidenta subrayó que es necesario tomar medidas urgentes para responder a las múltiples crisis que afronta hoy el mundo. Dijo que “los conflictos, la pandemia de COVID-19 y el cambio climático aumentan la vulnerabilidad de las personas en todo el mundo” y señaló que las subidas de los precios de los alimentos y la escasez de la oferta consiguientes están empujando a más millones de personas a la pobreza.

“En este contexto, sería inimaginable que la OMC no obtenga resultados en agricultura,” dijo a los participantes, e instó a los funcionarios encargados de las cuestiones comerciales a acercar sus posiciones de negociación para que se pueda lograr un resultado.

La Presidenta dijo que las consultas que ha mantenido recientemente se centraron en las restricciones a la exportación de alimentos, incluido el proyecto de decisión sobre los alimentos adquiridos con fines humanitarios por el PMA, y en las opciones para mejorar la transparencia en relación con las medidas comerciales de los Miembros de la OMC. También informó sobre las conversaciones recientes sobre el algodón.

Reacciones de los Miembros

Algunos Miembros dijeron que apoyaban el proceso dirigido por la DG y subrayaron que cualquier resultado de la CM12 debía contribuir al objetivo a largo plazo de reformar el comercio de productos agropecuarios reduciendo progresivamente las subvenciones causantes de distorsión del comercio y abriendo los mercados para los alimentos y los productos agrícolas. Según ellos, esto permitiría sentar las bases de un sistema más resiliente para el comercio de productos agropecuarios y ayudaría a los agentes del mercado a hacer frente a futuras crisis.

Los Miembros reconocieron que en las negociaciones subsistían diferencias, e intercambiaron opiniones sobre los resultados que podría ser factible obtener en la Conferencia Ministerial. Haciéndose eco de la declaración de la Presidenta, varios Miembros abogaron por el pragmatismo, el realismo y la flexibilidad para llegar a un resultado.

Incluso si, para los Miembros exportadores, la prioridad seguía siendo la disminución de los niveles de ayuda interna al sector agrícola, muchos de ellos pidieron que la Conferencia Ministerial acordara un plan de trabajo que orientara las negociaciones ulteriores, y señalaron que podría resultar difícil lograr resultados más ambiciosos dadas las divergencias entre los Miembros de la OMC en las negociaciones. Algunos Miembros consideraron que el resultado que se obtuviera en la CM12 debía allanar el camino para reforzar las disciplinas, en lugar de establecer nuevas exenciones respecto de las disciplinas existentes.

Muchos Miembros pidieron un resultado equilibrado que estableciera un conjunto de programas de trabajo en todos los temas de negociación, sobre la base del proyecto de texto de negociación de la Presidenta (TN/AG/50).

Esto incluiría lo siguiente: la reducción de la ayuda interna a la agricultura causante de distorsión del comercio; la mejora del acceso a los mercados agrícolas; la competencia de las exportaciones, que abarca medidas que se considera que tienen efectos comparables a las subvenciones a la exportación; las restricciones y prohibiciones a la exportación de productos alimenticios; el algodón; los programas de constitución de existencias públicas de alimentos; un nuevo “mecanismo de salvaguardia especial” propuesto que permitiría a los países en desarrollo aumentar temporalmente los aranceles en caso de incrementos súbitos de las importaciones o caídas de los precios; y la cuestión transversal de la transparencia.

Varios Miembros se mostraron favorables a utilizar el proyecto de texto de negociación de la Presidenta como trampolín para obtener un resultado en la CM12, mientras que otros adujeron que era necesario proseguir los trabajos para reflejar adecuadamente las propuestas formuladas por el Grupo Africano, el G-33 (un grupo de Miembros en desarrollo), el Grupo de Estados de África, el Caribe y el Pacífico (ACP) y el Grupo de Países Menos Adelantados.

Varios Miembros subrayaron en sus intervenciones la necesidad de que la OMC aborde en la CM12 la crisis actual relativa a la seguridad alimentaria tanto a corto como a medio plazo, y algunos de ellos tomaron nota del claro vínculo entre esas dos vías. Algunos Miembros también señalaron los efectos negativos del conflicto en Ucrania para la seguridad alimentaria regional y mundial.

Muchos participantes compartían la opinión de que un resultado sobre la exención de las restricciones a la exportación para las compras de alimentos realizadas por el PMA estaba “al alcance de la mano” y sería especialmente oportuno en este contexto.

Algunos Miembros también pidieron un apoyo más amplio a la “Declaración conjunta sobre un comercio abierto y previsible de productos agropecuarios y alimenticios” promovida por el Reino Unido (WT/GC/248), advirtieron contra la imposición de restricciones injustificadas a la exportación, subrayaron la importancia de la transparencia y pidieron a los Miembros que mantuvieran abiertos los mercados.

Un país en desarrollo importador neto de productos alimenticios señaló los problemas de seguridad alimentaria sin precedentes a los que se enfrentan los PMA y los países en desarrollo importadores netos de productos alimenticios debido a la reciente evolución de los mercados mundiales. Hizo hincapié en la necesidad de reflexionar sobre las respuestas apropiadas y pidió al Comité que añadiera la seguridad alimentaria como punto independiente de su orden del día para facilitar un debate continuo.

Un Miembro aprovechó esta ocasión para explicar a otros Miembros la razón de ser de una medida adoptada recientemente para restringir las exportaciones y se mostró favorable a una mejor vigilancia de las corrientes comerciales de cereales.

Algunos Miembros en desarrollo reiteraron su opinión de que la ayuda interna debía reducirse en primer lugar a niveles “de minimis” — definidos como porcentaje del valor de la producción de un Miembro —, lo que reduciría los límites máximos actuales de la “Medida Global de la Ayuda”, que en el caso de algunos de ellos, superaban su umbral de minimis.

Constitución de existencias públicas con fines de seguridad alimentaria

Aunque varios países volvieron a pedir una “solución permanente” a los problemas que algunos dicen tener cuando compran productos alimenticios a precios administrados en el marco de programas de constitución de existencias públicas con fines de seguridad alimentaria, algunos Miembros exportadores de productos agropecuarios presentaron datos que según ellos seguían planteando interrogantes sobre la necesidad de semejante resultado.

El Canadá presentó una comunicación conjunta con Australia, Chile, Colombia, Nueva Zelandia, el Paraguay, Tailandia, los Estados Unidos y el Uruguay (JOB/AG/210/Rev.2 distribuida inicialmente en julio de 2021 y actualizada en marzo de 2022). En ella se recopila la información disponible sobre todos los programas de constitución de existencias públicas que los Miembros en desarrollo han aplicado durante el período 2001-2022. Los copatrocinadores dijeron que el análisis demostraba que persistían importantes lagunas en la información y que la utilización limitada de estos programas ponía en tela de juicio la necesidad de una solución permanente para la constitución de existencias públicas.

Algunos Miembros en desarrollo cuestionaron el método utilizado y sugirieron que se añadiera información sobre los Miembros desarrollados para asegurarse de que el análisis fuera comparable. Adujeron que muchos Miembros en desarrollo tenían dificultades para informar sobre sus programas a la OMC, y que por ello la falta de datos disponibles no se podía interpretar como una razón para abandonar las negociaciones sobre una solución permanente a los desafíos a los que se enfrentaban en esta esfera.

Si bien reconocían las legítimas preocupaciones de los Miembros en desarrollo con respecto a la seguridad alimentaria, los no proponentes insistieron en que no podían aceptar la ampliación de la decisión provisional de Bali relativa a la constitución de existencias públicas para convertirla en una solución permanente (lo que, según ellos, daría lugar a más subvenciones causantes de distorsión del comercio). Además, algunos señalaron que la seguridad alimentaria va más allá de la simple constitución de existencias públicas y debe abordarse de forma holística como parte integrante del paquete global de reformas en la esfera de la agricultura.

Varios grupos de Miembros indicaron también que seguían trabajando en comunicaciones de negociación revisadas o actualizadas que esperaban presentar en breve.

Mecanismo de Salvaguardia Especial (MSE)

La Presidenta observó el interés de los Miembros en proseguir los debates sobre las ideas presentadas por el Grupo de PMA en el documento JOB/AG/227, en el que se aboga por un instrumento de salvaguardia para corregir los efectos negativos de las importaciones subvencionadas. La Presidenta dijo que este enfoque también puede encajar en el marco del debate temático propuesto en su proyecto de texto de negociación. Señaló también que, si bien algunos Miembros siguen considerando que esta cuestión está directamente relacionada con las mejoras del acceso a los mercados, otros consideran que no lo está.

Aunque algunos Miembros en desarrollo seguían pidiendo un resultado en esta esfera en la CM12, otros indicaron que podrían aceptar un programa de trabajo para orientar las negociaciones después de la Conferencia Ministerial.

La Presidenta pidió a los Miembros que sean abiertos y sensibles a las preocupaciones de los demás, y dijo que sigue dispuesta a convocar nuevas consultas sobre este tema para permitir la obtención de un resultado en esta esfera en la CM12.

Próximas etapas

La Presidenta lamentó que hasta la fecha los Miembros no hayan podido avanzar de manera significativa para salvar algunas diferencias que subsisten entre sus posiciones de negociación. Indicó que informaría a la DG sobre los debates de los Miembros y seguiría reflexionando sobre la mejor manera de avanzar.

“Sigo resuelta a lograr un resultado en la CM12 y pondré todo mi empeño en facilitar el proceso de negociación”, dijo, observando que se prevén más consultas y que es necesario que los Miembros muestren más flexibilidad.

“Les invito a que examinen todos los temas objeto de negociación de manera constructiva y pragmática para ver lo que es viable alcanzar para la CM12”, concluyó.

La próxima reunión de negociación abierta a todos los Miembros está prevista para el 1 de junio. Es posible que se celebre una reunión antes de esa fecha si se considera necesario.

Más información

La información de antecedentes relativa a las negociaciones sobre la agricultura puede consultarse aquí.

El glosario sobre agricultura está disponible aquí

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