En primer lugar, quisiera felicitar a Uzbekistán por la inauguración del Foro Internacional sobre Inversiones de Tashkent.

En mi primera visita a Uzbekistán, hace varios meses, tuve la oportunidad de visitar la antigua ciudad de Bujará, y me impresionaron sobremanera la rapidez y gran escala de los proyectos de desarrollo que se están llevando a cabo allí. La antigua ciudad está convirtiéndose en un destino nuevo para las inversiones, y entiendo que lo mismo está ocurriendo en todo Uzbekistán.

El desarrollo de un estado requiere un objetivo claro, perseverancia y buenas oportunidades. Uzbekistán tiene actualmente la ocasión de aprovechar una buena oportunidad de este tipo. Cuentan ustedes con el firme liderazgo de su Presidente, un objetivo de desarrollo claro, un pueblo laborioso y empresas dinámicas. Confío en que alcanzarán el objetivo establecido en la Estrategia para el Desarrollo del Nuevo Uzbekistán 2022-2026.

La inversión extranjera directa y el comercio, motores importantes del crecimiento económico, están estrechamente relacionados y se complementan entre sí.

Por una parte, la política comercial desempeña un papel fundamental en la atracción de inversiones extranjeras directas. Las decisiones de los inversores se basan en varios factores, como el tamaño del mercado, el costo de los insumos, el entorno de inversión y el sistema jurídico del país receptor. Una política comercial sensata sustenta todos estos factores.

Por otra parte, en el mundo actual las cadenas de valor mundiales ocupan un lugar destacado en los procesos de producción. La mayoría de los productos finales comercializados no se producen en un solo país. El comercio ya no consiste en exportar mercancías de producción nacional, sino que se refiere más bien a la cooperación empresarial con empresas extranjeras y multinacionales. La finalidad de la política comercial y de la política de inversiones es integrar al país en las cadenas de valor mundiales. En este contexto, la adhesión de Uzbekistán a la OMC es muy pertinente para el presente foro.

La pertenencia a la OMC puede aportar numerosos beneficios a los países en proceso de adhesión.  Permítanme detallar algunos de estos beneficios que, a mi juicio, tienen gran interés para Uzbekistán.

En primer lugar, la adhesión a la OMC brindará a las empresas y las exportaciones uzbekas inmensas oportunidades de acceso a los mercados, lo que generará nuevos puestos de trabajo e impulsará significativamente el nivel de vida.

En segundo lugar, la mayor apertura del mercado interno ofrecerá a más empresas uzbekas oportunidades de colaboración con empresas extranjeras mediante asociaciones empresariales o empresas conjuntas. Atraerán una mayor inversión extranjera, conocerán tecnologías avanzadas y se beneficiarán de experiencias de gestión empresarial enriquecedoras. Todo ello las hará más competitivas en el mercado internacional.

En tercer lugar, la pertenencia a la OMC, al adecuar las políticas de Uzbekistán a las normas del comercio internacional, ayudará al país a mejorar la gobernanza, aumentar la eficiencia y convertirse en una economía moderna plenamente competitiva y dinámica.

En cuarto lugar, la OMC se interesa por las microempresas y las pequeñas y medianas empresas, que constituyen el 95% de las empresas del mundo y generan, a nivel mundial, el 60% de los puestos de trabajo, pero que se han visto gravemente afectadas por la pandemia de COVID-19. Para ayudar a las pequeñas empresas a participar en el comercio internacional, un grupo de trabajo informal de la OMC ha estado trabajando en cuestiones como la preparación cibernética, la facilitación de las importaciones de envíos de poco valor y las políticas innovadoras para las pequeñas empresas. Se han proporcionado orientaciones y buenas prácticas a los responsables de la formulación de políticas. La adhesión a la OMC permitirá a las pequeñas empresas uzbekas beneficiarse de los mercados internacionales.

Uzbekistán ha reanudado en los últimos años su proceso de adhesión a la OMC. Los Miembros de la OMC apoyan este proceso y están deseando comprobar los progresos y dar la bienvenida a Uzbekistán como Miembro de pleno derecho de la Organización.

La adhesión a la OMC nunca es fácil para ningún país, pero confío en que, gracias a los esfuerzos conjuntos de Uzbekistán, los actuales Miembros de la OMC y las organizaciones internacionales de desarrollo pertinentes, Uzbekistán podrá convertirse en Miembro de pleno derecho de la OMC en los próximos años.

Según acabo de explicar, Uzbekistán lo tiene todo, salvo una cosa: el país carece del sistema multilateral de comercio que propicia un entorno empresarial internacional justo y previsible.

El 2022 es el año del tigre en el calendario lunar. Un viejo proverbio chino habla de «ponerle alas al tigre» para incrementar su capacidad. Creo que la pertenencia a la OMC serían las alas de Uzbekistán y espero que Uzbekistán obtenga sus alas empoderantes lo antes posible. Muchas gracias.