EXÁMENES DE LA POLÍTICAS COMERCIALES: BELICE Y SURINAME
12 y 14 de julio de 2004

Observaciones formuladas por la Presidenta a modo de conclusión

Ver también:
> Belice — Comunicado de prensa: Los compromisos contraídos en el marco de la OMC podrían servir de base a los futuros esfuerzos de reforma necesarios para sostener el crecimiento

> Surniname — Comunicado de prensa: Los compromisos ampliados en el marco de la OMC podrían promover el comercio y la inversión

Los primeros Exámenes de las Políticas Comerciales de Belice y Suriname han esclarecido considerablemente las políticas y prácticas de ambos países en materia de comercio e inversión. Se lo debemos a la documentación preparada para la reunión, a las valiosas contribuciones realizadas por las delegaciones de Belice y Suriname, a las observaciones de nuestro ponente y a la participación de varios miembros del Órgano de Examen de las Políticas Comerciales (OEPC). Me complace enormemente el hecho de que, pese a sus apretadas agendas, los Ministros Courtenay y Jong Tjien Fa decidieran asistir a esta reunión y considerarla un testimonio del deseo de sus Gobiernos de demostrar de manera práctica su adhesión al sistema multilateral de comercio.

Los Miembros alabaron a Belice y Suriname por sus actividades de reforma económica e institucional, de las que forman parte iniciativas autónomas y regionales para liberalizar el comercio y la inversión. Los progresos alcanzados en estos frentes son considerables. Los Miembros apreciaron los esfuerzos desplegados por ambos países pese a su limitada capacidad institucional y a no tener una representación permanente en Ginebra. No obstante, también instaron a Belice y Suriname a que cumplieran sus obligaciones de notificación en el marco de la OMC aún pendientes de cumplimiento, si fuese necesario con ayuda de la Secretaría de la OMC.

Algunos Miembros señalaron la importancia de la participación de Belice y Suriname en la CARICOM como un escalón hacia una mayor integración en la economía mundial y motor de crecimiento. También solicitaron algunas aclaraciones sobre la futura evolución de la CARICOM y otros acuerdos preferenciales en que participan Belice y Suriname.

Aunque tomaron nota de las diferencias de resultados entre la economía de Belice y la de Suriname, los Miembros subrayaron la necesidad de aumentar la coherencia de la adopción de medidas macroeconómicas en ambos países para alcanzar un desarrollo sostenible. Se alentó a Belice y Suriname a que continuaran diversificando sus bases de exportación, tanto por lo que respecta a los mercados como a los productos. A este respecto, algunos Miembros señalaron los buenos resultados obtenidos por Belice en el desarrollo de su sector del turismo como un paso en la dirección adecuada.

Los Miembros acogieron con satisfacción la disminución del promedio arancelario NMF aplicado en Belice y Suriname en los últimos años. Sin embargo, se expresó preocupación respecto de los niveles relativamente altos de protección arancelaria de que gozaba el sector agropecuario de ambos países. Se invitó a Belice y Suriname a que redujeran sus consolidaciones arancelarias a tipos más próximos a los tipos aplicados con el fin de mejorar la previsibilidad de sus regímenes comerciales. Los Miembros observaron con preocupación que determinados tipos arancelarios aplicados excedían sus niveles consolidados.

Los Miembros también formularon a Belice y Suriname preguntas relativas a las aduanas, los reglamentos técnicos, las medidas sanitarias y fitosanitarias, los planes de incentivos, la contratación pública, las empresas estatales y la protección de los derechos de propiedad intelectual.

En cuanto a las políticas sectoriales, los Miembros apreciaron los esfuerzos desplegados por Belice y Suriname para liberalizar el comercio de servicios, pero destacaron la necesidad de fortalecer el marco normativo, mejorar la infraestructura y fomentar la competencia. Los Miembros solicitaron más información sobre las políticas sectoriales y las condiciones de acceso a los mercados en los sectores de la electricidad, las telecomunicaciones, la banca, el turismo y los servicios de distribución y los servicios prestados a las empresas. Tomando conocimiento del hecho de que, a la sazón, los compromisos contraídos por Belice y Suriname en el marco del AGCS eran limitados, los Miembros invitaron a ambos países a ampliarlos en el contexto del Programa de Doha para el Desarrollo.

Con respecto a las cuestiones específicas planteadas en relación con las políticas comerciales de Belice, algunos Miembros cuestionaron la aplicación de determinados impuestos internos sólo a las importaciones. Varios Miembros también expresaron preocupación por las posibles distorsiones atribuibles al régimen de licencias no automáticas de Belice y alentaron a este país a que lo hiciera compatible con las disciplinas de la OMC. Belice reiteró su compromiso de cumplir las obligaciones contraídas en el marco de la OMC pertinentes y señaló que tenía la intención de proceder a una revisión de su régimen de licencias.

En cuanto a Suriname, algunos Miembros consideraron que los procedimientos para aprobar las inversiones eran engorrosos y subrayaron la necesidad de acelerar las reformas del sector público y reducir el grado de injerencia gubernamental en la economía. A este respecto, la reciente creación de un servicio de ventanilla única para la concesión de licencias a las empresas era un paso que podría ser importante. En relación con las consolidaciones arancelarias, solicitaron detalles sobre la situación de la renegociación de Suriname de conformidad con el artículo XXVIII del GATT. Se felicitó a Suriname por haber eliminado el régimen de licencias adoptado previamente para proteger a los productores nacionales.

Apreciamos las respuestas y las explicaciones presentadas oralmente y por escrito por las delegaciones de Belice y Suriname.

En conclusión, creo que este Examen ha cumplido ampliamente el objetivo de aumentar nuestro conocimiento de los regímenes comerciales de Belice y Suriname y del contexto en que se formulan y aplican. A este respecto, hemos tomado conciencia de las grandes dificultades a que se enfrentan Belice y Suriname para participar en el sistema multilateral. Es importante superarlas puesto que la OMC sigue siendo el mejor foro para desarrollar un sistema de comercio basado en normas. Si tenemos en cuenta las opiniones formuladas por los Miembros durante esta reunión, en la actualidad Belice y Suriname están en mejores condiciones para trazar futuros ajustes de política que beneficiarán tanto al sistema multilateral de comercio como a las necesidades de desarrollo propias de cada uno de estos dos países.