NOTICIAS: NOTICIAS 2003

16 de diciembre de 2003
CONSEJO GENERAL: SEGUIMIENTO DE LA CONFERENCIA MINISTERIAL DE CANCÚN

Recapitulación del Presidente: los grupos de negociación pueden reanudar sus trabajos, pero sigue sin haber acuerdo sobre las cuestiones espinosas

Los Miembros están dispuestos a reanudar los trabajos en los grupos de negociación, pero siguen sin producirse avances significativos, dijo el Presidente del Consejo General Carlos Pérez del Castillo el 16 de diciembre de 2003, al recapitular las deliberaciones del Consejo sobre el seguimiento de la Conferencia Ministerial de Cancún.

> Ver también la declaración inicial del Presidente
> Ver también la declaración inicial del Director General Supachai Panitchpakdi
> Las instrucciones dadas por los Ministros en Cancún

Reunión del Consejo General de los días 15 y 16 de diciembre de 2003
Punto 1 del orden del día – Seguimiento de la Conferencia Ministerial de Cancún

Observaciones finales del Presidente del Consejo General

Con esta última declaración estamos llegando al término de este importante punto de nuestro orden del día. No intentaré hacer una reseña completa de lo que ha ocurrido durante el último día y medio. Hemos escuchado 52 intervenciones, muchas en nombre de grupos de países, de modo que creo que se han expresado las posiciones de la gran mayoría de los Miembros de esta Organización. Debo reconocer que estas posiciones u opiniones, desde mi punto de vista, no fueron especialmente nuevas, pero por otra parte puedo observar la utilidad de este ejercicio, en el sentido de que los países han podido dejar constancia de posiciones y opiniones que habían expresado en el curso de las últimas ocho semanas de manera informal durante las consultas. Esto, a mi juicio, añade cierto valor a nuestra labor.

Diría que aunque esta reunión no supuso un avance fundamental en nuestra labor, todos reconocen que hemos hecho progresos, y que ahora tenemos una visión más clara de las cuestiones clave, que conocemos las dificultades que tendremos que enfrentar, y que, si bien la Ronda no está nuevamente en marcha y tal vez no estemos en ese punto todavía, hemos avanzado considerablemente en esa dirección. No salgo de esta reunión con ningún sentimiento de fracaso, crisis ni decepción. Más bien observo un enfoque pragmático, en el sentido de que se necesita más tiempo para tratar los asuntos no terminados que nos encomendaron nuestros Ministros en Cancún, lo que hemos intentado implementar durante las últimas semanas.

Creo que en esta reunión todos los Miembros han puesto de relieve la reconfirmación de un sentimiento de empeño y compromiso con el Programa de Doha para el Desarrollo y el sistema multilateral de comercio. Incluso he observado –como un rasgo positivo- un apoyo renovado a los esfuerzos orientados al intento de terminar esta ronda a tiempo. Si hablo de un rasgo positivo, es porque algunas veces, durante nuestras consultas de las últimas semanas, muchos de los Miembros han cuestionado la fecha de 2004. Observo en esta reunión que muchas delegaciones se han comprometido a hacer lo máximo posible para tratar de cumplir ese mandato.

Debo confesar que, como lo experimenté durante las consultas y lo reflejé en mi informe, no veo que en esta reunión haya desaparecido la brecha entre las expresiones de flexibilidad, compromiso y empeño y una traducción de estas expresiones en nuevas posiciones de negociación que nos permitan buscar un terreno común o dar cabida a la posición de otros. Se trata de una labor que quedará pendiente durante las próximas semanas. Por cierto, si deseamos avanzar debemos recuperar el sentimiento de urgencia que parece haberse evaporado, como lo indicaron algunos Miembros, y hemos de cerrar la brecha entre expresiones de buena voluntad y compromiso y su traducción en posiciones de negociación.

Por lo tanto, la determinación y la voluntad políticas de llegar a avenencias es por cierto lo que nos tendrá ocupados las próximas semanas o meses que tenemos por delante. Creo que todavía tenemos ante nosotros una pequeña franja de oportunidad para ir adelante y que debemos aprovecharla al máximo.

Con respecto a este proceso, considero que la propuesta que he presentado a este Consejo General ha sido, en general, aceptada. Existe la voluntad de reiniciar la labor de los grupos de negociación, así como de otros órganos que deben ocuparse del Programa de Doha, en el entendimiento de que reiniciar esta labor no significa de ninguna manera perder una visión general del proceso o un sentido de la integración horizontal de las cuestiones, que, a mi juicio, sigue siendo un ingrediente esencial para el éxito. Considero también que al identificar determinadas cuestiones, mi informe da un sentido de dirección y orientación en lo que respecta a nuestra labor futura. Percibo que todos desean basarse en los progresos y la valiosa labor que hemos logrado realizar hasta ahora y evitar deshacer lo que ha sido hecho.

Algunas delegaciones han planteado cuestiones de procedimiento o cuestiones que combinan elementos procesales y sustantivos concernientes a difíciles cuestiones respecto de las cuales existe hasta ahora poca convergencia entre las delegaciones, tales como los temas de Singapur. Repito lo que ya he destacado en mi informe con respecto a esos temas, es decir, que la labor que ya hemos iniciado continuará. Eso significa que seguiremos explorando las posibilidades de concertar acuerdos sobre un enfoque multilateral respecto de la facilitación del comercio y la transparencia de la contratación pública, y que esta labor tendrá lugar a nivel del Consejo General con la asistencia del Director General Adjunto Yerxa. No he hecho ninguna propuesta con respecto a los grupos de trabajo.

Pienso que todos ustedes comprenden que en la situación en que nos encontramos con respecto a estos temas, la Presidencia no puede aclarar más los asuntos sobre los que los Miembros aún no pueden encontrar un terreno común. El problema no es la falta de claridad desde la Presidencia, es la falta de acuerdo entre los Miembros. Se trata de temas sobre los que será necesario seguir reflexionando y consultando, y estoy decididamente de acuerdo con aquellos que advierten contra los intentos de negociar con los Presidentes. Pueden estar seguros de que los Presidentes tampoco lo desean. Lo que es urgentemente necesario es una negociación seria entre los Miembros.

Como digo en mi informe, el Presidente del Consejo y el Director General, que también es presidente del CNC, seguirán asegurando el mantenimiento de un sentido horizontal del programa de trabajo, y como lo he señalado algunas cuestiones tal vez exijan la celebración de consultas sobre la manera de hacerlas avanzar. Las opiniones expresadas hoy, así como en consultas anteriores, formarán, por supuesto, parte del contexto de cualquiera de esas consultas.

Por consiguiente sugiero que el Consejo General tome nota de mi declaración, así como de todas las demás declaraciones que se han hecho durante el examen de este punto. Así queda decidido.