NOTICIAS: COMUNICADOS DE PRENSA 2003

Press/337
22 de abril de 2003
CIFRAS DEL COMERCIO MUNDIAL, 2002

El comercio se recuperó en 2002, pero continúa la incertidumbre

Según las últimas cifras de la OMC, el comercio de mercancías creció en un 2,5 por ciento en 2002, impulsado por la fuerte demanda de los Estados Unidos y las grandes economías asiáticas, después de haber disminuido un 1 por ciento en 2001.

Pero el crecimiento del comercio, que fue considerablemente superior al incremento del 1,5 por ciento de la producción mundial total, fue irregular y disimuló la parquedad de los resultados comerciales en muchas regiones, en particular América Latina y Europa Occidental.

Una considerable incertidumbre ensombrece las perspectivas de crecimiento del comercio para 2003. Según indicios preliminares, el crecimiento del volumen del comercio, inferior al 3 por ciento, será ligeramente superior al de 2002 o incluso no superará ese nivel. Este resultado corresponde a mucho menos de la mitad del coeficiente medio de crecimiento del comercio alcanzado en el decenio de 1990 (6,7 por ciento). El riesgo de que estas previsiones para 2003 deban corregirse a la baja es importante, teniendo en cuenta la continuada atonía de la economía mundial, el conflicto en Iraq y la posibilidad de que siga propagándose el Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SRAS).

Esas cifras del comercio reflejan la creciente incertidumbre política y económica que hoy impera en el mundo. Esa incertidumbre es perjudicial para el crecimiento económico y el desarrollo y puede dar lugar a una mayor inestabilidad en todo el mundo. Los gobiernos deben dar señales de que están dispuestos a afrontar este problema. Una contribución importantísima a ese esfuerzo sería acelerar los trabajos sobre las negociaciones del Programa de Doha para el Desarrollo, dijo el Director General Supachai Panitchpakdi.

Iniciado en noviembre de 2001 por los Ministros reunidos en Qatar, el Programa de Doha para el Desarrollo consiste en una amplia serie de negociaciones sobre diversos temas como la agricultura, las cuestiones de desarrollo, el comercio de servicios, los aranceles industriales, las normas de la OMC y el comercio y el medio ambiente. Esas conversaciones han avanzado con desigual fortuna y, como está previsto que concluyan el 1º de enero de 2005, el Director General Supachai ha instado a los 146 gobiernos Miembros a que se armen del coraje político necesario para salvar las diferencias en las distintas negociaciones.

La valoración por parte de la OMC de las cifras del comercio en 2002 se basa en la primera compilación preliminar de estadísticas correspondiente al año pasado. El valor de las exportaciones de mercancías aumentó en un 4 por ciento para situarse en 6.240 millardos de dólares EE.UU., lo que casi compensó la disminución del año anterior. El comercio de servicios comerciales aumentó un poco más rápidamente que el comercio de mercancías y alcanzó un nuevo nivel sin precedentes de 1.540 millardos de dólares EE.UU.

La recuperación del comercio se produjo en medio de la debilidad de la economía mundial, unas corrientes de inversión considerablemente reducidas, importantes variaciones de los tipos de cambio, una confianza empresarial muy deteriorada, un aumento de las restricciones en las transacciones comerciales internacionales para reducir los riesgos del terrorismo y un aumento de las tensiones geopolíticas.

El aumento del comercio de servicios comerciales se produjo a pesar del persistente temor del terrorismo y el incremento de los precios de los combustibles que limitaron el crecimiento de los servicios de transporte y de viajes internacionales. Pero esa situación resultó compensada con creces por el comercio en otros servicios que continuó en rápida expansión.

La debilidad de los gastos en inversión fija contribuyó considerablemente a la atonía del crecimiento global de los países industriales. Siguieron disminuyendo los gastos mundiales en equipo electrónico, equipo físico de TI y material de fabricación de semiconductores.

La recuperación económica mundial resultó ser desigual, con importantes diferencias de ritmo de crecimiento entre las regiones. Las fuerzas impulsoras de la recuperación de la actividad económica mundial fueron los Estados Unidos, las economías avanzadas de Asia Oriental, China y las economías en transición. En cambio, Europa Occidental y el Japón registraron un estancamiento o un descenso de la demanda interna. En América Latina, la crisis de la Argentina y Venezuela contribuyeron a agravar la depresión.

Los resultados comerciales reflejaron en gran parte las pautas de crecimiento económico. La expansión del comercio fue intensa en Asia y en las economías en transición. Las importaciones de América del Norte se recuperaron en consonancia con el incremento de la demanda interna, aunque las exportaciones disminuyeron en 2002. El comercio permaneció estancado en Europa Occidental y el Japón y registró una contracción en América Latina de resultas del desbarajuste económico en varios países de la región.

Algunos detalles de la evolución en determinados países o grupos de países:

  • El volumen del comercio de mercancías de los países en desarrollo de Asia aumentó en un 12,5 por ciento, aproximadamente, lo que dio lugar a un aumento de 2 dígitos de las exportaciones e importaciones del conjunto del continente. En la región, las pautas de crecimiento del Japón, que sigue siendo la economía más importante de Asia, y de China y la India, los dos países más poblados del mundo, también fueron divergentes. El valor de las exportaciones e importaciones de mercancías de China aumentó en más del 20 por ciento, mientras que el de las de la India también registró un incremento de 2 dígitos. China ha superado al Reino Unido y ha pasado a ocupar el quinto lugar entre los principales países comerciantes del mundo. El aumento de las exportaciones de mercancías del Japón fue sólo del 3 por ciento, mientras que las importaciones disminuyeron.
     
  • El comercio de las economías en transición continuó registrando un importante crecimiento, con un aumento del comercio de mercancías del 10 por ciento, aproximadamente, como consecuencia del fuerte incremento de la demanda interna y de las corrientes de inversiones extranjeras directas (IED) en la región.
     
  • Las importaciones de los Estados Unidos aumentaron en un 3 por ciento empujadas por el gasto de consumo, que se mantuvo, por una política fiscal cada vez más expansiva. Pero las exportaciones disminuyeron casi un 4 por ciento como reflejo en parte de la disminución de la demanda de algunos de sus socios comerciales más importantes cuyas economías apenas crecían, como en el caso de Europa Occidental y el Japón, o se encontraban en franca contracción, como en América Latina. La falta de competitividad de los precios quizás haya desempeñado también un papel importante puesto que la disminución de las exportaciones de los Estados Unidos afectó incluso a las destinadas a regiones cuyas importaciones registraron un fuerte crecimiento.
     
  • El volumen del comercio de Europa Occidental experimentó un estancamiento y las exportaciones de mercancías aumentaron sólo un 0,6 por ciento en tanto que las importaciones disminuyeron un 0,5 por ciento.
     
  • América Latina sufrió uno de sus peores años con las crisis de la Argentina, Venezuela y las dificultades del Brasil en el período anterior a las elecciones nacionales. Las importaciones de mercancías de América Latina disminuyeron en más del 5 por ciento en 2002, aunque las exportaciones de mercancías aumentaron en un 2 por ciento, aproximadamente, puesto que la disminución del comercio intrarregional (especialmente del comercio entre signatarios del MERCOSUR) fue compensado por un aumento de los envíos a otras regiones.
     
  • Las exportaciones e importaciones de los países menos adelantados aumentaron el último año, aunque ello no modifica la situación global puesto que su participación en el comercio mundial es marginal.
     
  • Los países menos adelantados exportadores de petróleo registraron un fuerte incremento del valor en dólares de sus envíos puesto que aumentaron la producción y el volumen de su comercio. Continuó la expansión de las exportaciones de los países exportadores de productos básicos distintos de los combustibles después del notable aumento registrado en 2001. Sin embargo, los países exportadores de productos manufacturados experimentaron un estancamiento.

Los precios del petróleo crudo, el oro y los productos agrícolas aumentaron en 2002 proporcionando un importante estímulo a los países en desarrollo exportadores de productos básicos. Ahora bien, los precios de los minerales y metales continuaron a la baja. Los precios de los productos manufacturados experimentaron cierta recuperación, pero se situaron aún alrededor de un 10 por ciento por debajo de su nivel de 1995.

Durante 2002, el tipo de cambio efectivo real del dólar de los Estados Unidos se depreció, mientras que los del euro y el yen se apreciaron. No obstante, los reajustes no parecen haber influido de manera importante en el déficit comercial de los Estados Unidos ni en el excedente por cuenta corriente acumulado por los países de la eurozona, el Japón y los países en desarrollo de Asia.

Las corrientes internacionales de capital aumentaron durante el decenio de 1990 hasta alcanzar un máximo en el año 2000, pero han experimentado desde entonces una drástica disminución. Las regiones tanto desarrolladas como en desarrollo han resultado afectadas por la reducción de las corrientes de IED. Fueron excepciones notables las entradas de inversiones extranjeras directas en China y Europa Central y Oriental que continuaron aumentando considerablemente.

En detalle:

Evolución del comercio en 2002

La situación económica mundial en 2002

Gráfico 1
Disminución de la expansión del comercio y la producción en el cuarto trimestre de 2002
(Variación porcentual intertrimestral)

La recuperación económica mundial fue desigual y perdió fuerza en el segundo semestre de 2002, con lo que el crecimiento anual de la producción mundial quedó limitado a sólo el 1,5 por ciento. Las fuerzas impulsoras de la recuperación de la actividad económica mundial fueron la pujanza de la recuperación de la demanda interna de los Estados Unidos y las economías avanzadas de Asia Oriental. La expansión del PIB mundial también fue sostenida por China y las economías en transición, que continuaron registrando un ritmo de crecimiento económico mucho más rápido que el de la economía mundial. En fuerte contraste, el Japón y Europa Occidental siguieron experimentando un estancamiento o declive del crecimiento de la demanda interna. Y la economía de América Latina se hundió en una recesión ocasionada en gran parte por las crisis de la Argentina y Venezuela. La renta por habitante de la región disminuyó por segundo año consecutivo.

En los países industriales, las principales categorías de gastos del PIB tuvieron un comportamiento muy diverso durante la desaceleración y recuperación cíclicas. El descenso de las existencias y su reposición en 2002 fue el factor más destacado de la recuperación cíclica del pasado año. Las variaciones de las existencias en los países de la OCDE redujeron el crecimiento del PIB en un 0,8 por ciento en 2001 pero lo incrementaron en un 0,2 por ciento en 2002. En los Estados Unidos, el consumo público experimentó una expansión del 3 por ciento y fue también el componente de la demanda de crecimiento más rápido en los países industriales. El consumo privado en la zona de la OCDE volvió a aumentar un 2 por ciento en 2002, puesto que la aceleración de la demanda de los consumidores de los Estados Unidos fue compensada por la desaceleración en el Japón y Europa Occidental. Un elemento importante de la debilidad de la recuperación fue la persistencia de la contracción de las inversiones no destinadas a la vivienda que fue aún más pronunciada el pasado año que en 2001.

La amenaza del terrorismo ha llevado a muchos gobiernos y empresas a adoptar diversas medidas para mejorar la seguridad y limitar los riesgos de futuros ataques terroristas. Algunas de esas medidas han supuesto una restricción de la libre circulación de personas y mercancías. El costo comprende, no sólo los gastos directos que implican esas medidas de seguridad que deben adoptar los gobiernos y las empresas, sino también los efectos indirectos en el comercio en forma de procedimientos más engorrosos y retrasos. El aumento de los riesgos y tensiones geopolíticos también ha repercutido desfavorablemente en el comercio internacional por medio de la reciente alza de los precios del petróleo.

La atonía de la actividad económica y el generalizado exceso de capacidad en el sector manufacturero contribuyeron a un nuevo descenso de las tasas de inflación.(1) Las tasas de inflación disminuyeron ligeramente en Europa Occidental, América del Norte y Asia. Los precios al consumo, aunque registraron un notable descenso en los países en transición con respecto a valores que a veces eran de 2 dígitos, aumentaron en América del Sur y Centroamérica como consecuencia de las devaluaciones monetarias. Como el crecimiento económico mundial fue a la zaga de la productividad y del aumento de la población activa, el desempleo y el subempleo empeoraron en la mayoría de las regiones. Las tasas de desempleo registradas aumentaron en América del Norte, Europa Occidental y el Japón. En este último país, la tasa de desempleo alcanzó un nivel sin precedentes del 5,5 por ciento, más del doble del nivel comunicado a comienzos del decenio de 1990. En América Latina, el pronunciado retroceso de la producción ha conducido a un marcado empeoramiento de la situación del empleo. Según la CEPAL, la tasa de desempleo urbano medio en la región aumentó hasta el 9,1 por ciento, la tasa más alta observada en el decenio de 1990.(2)

Las marcadas diferencias entre el ritmo de crecimiento de la demanda interna de los Estados Unidos, los países en desarrollo de Asia y las economías en transición, por una parte, y el Japón, Europa Occidental y América Latina, por otra, contribuyeron a importantes cambios en las balanzas por cuenta corriente y comercial. El Japón y Europa Occidental registraron un aumento de sus exportaciones netas. Por consiguiente, el excedente por cuenta corriente (y comercial) del Japón y la Unión Europea se amplió con incrementos equivalentes al 1 por ciento y el 0,7 por ciento del PIB, respectivamente. Como consecuencia de la neta disminución de las entradas de capital, América Latina tuvo que reducir sus importaciones, lo que llevó a un excedente comercial y redujo el déficit por cuenta corriente de la región. El déficit por cuenta corriente de los Estados Unidos aumentó a más de 500.000 millones de dólares EE.UU., o sea, el 5 por ciento del PIB, lo que constituyó un máximo histórico en términos tanto absolutos como relativos.

Las corrientes internacionales de capital aumentaron durante todo el decenio de 1990 y alcanzaron su nivel máximo en 2000. Desde entonces han experimentado una drástica disminución, como pone de manifiesto el fuerte incremento y descenso de las inversiones extranjeras directas (IED). Las corrientes totales de IED aumentaron de aproximadamente 200.000 millones de dólares EE.UU. a principios del decenio de 1990 a cerca de 1,2 billones de dólares EE.UU. en 2000. En 2001, el valor de esas corrientes registró una caída del 50 por ciento, aproximadamente, y en 2002 de un 25 por ciento adicional, hasta situarse nuevamente en torno a los 500.000 millones de dólares EE.UU., el nivel alcanzado ya cinco años antes. Las regiones tanto desarrolladas como en desarrollo han resultado afectadas por la reducción de las corrientes de IED. Sólo las entradas de IED en China y Europa Central y Oriental continuaron aumentando.

Durante 2002, el tipo de cambio efectivo real del dólar de los Estados Unidos se depreció, mientras que los del euro y el yen se apreciaron. A plazo medio, la depreciación del dólar de los Estados Unidos, después del aumento de casi el 20 por ciento experimentado entre 1995 y 2001, podría contribuir a frenar el constante aumento del déficit comercial de los Estados Unidos. Un aspecto de la caída del dólar con respecto a la moneda de los principales países comerciantes es el efecto inflacionario en los precios del comercio mundial calculados en dólares. El comercio entre países miembros de la UE, si bien calculado en euros experimentó un estancamiento en 2002, registró un aumento de casi el 5 por ciento calculado en dólares. El impacto global de la evolución de los tipos de cambio en los valores del comercio en 2002 contrasta con la tendencia imperante entre 1995 y 2001, cuando la apreciación del dólar tuvo como efecto la deflación de los precios del comercio mundial calculados en dólares.

Por consiguiente, por primera vez desde 1995, los precios en dólares de los productos agrícolas y manufacturados objeto de comercio internacional registraron un incremento anual. Los precios del petróleo se recuperaron de su bajo nivel de comienzos de 2002 con unos precios medios anuales en 2002 que excedieron ligeramente a los del año anterior. Continuó el descenso de los precios de los metales, especialmente del aluminio, que es el metal más comercializado internacionalmente. La recuperación de los precios de los productos alimenticios fue el resultado final de unos precios más altos de todos los tipos de cereales, la soja y los aceites vegetales, que superaron las reducciones de los precios de la carne, los alimentos de origen marino, el azúcar y las frutas tropicales. Los precios de los cereales, en especial el trigo, aumentaron al ocasionar la sequía en cuatro de las cinco regiones exportadoras tradicionales una disminución de la producción por segundo año consecutivo.

  
La recuperación del comercio superó la de la producción

La recuperación de la actividad económica mundial coincidió con un repunte de las corrientes comerciales internacionales. Con arreglo a las estimaciones preliminares, las exportaciones mundiales de mercancías aumentaron en términos reales en un 2,5 por ciento en 2002 después de la contracción experimentada el año anterior. Aunque el comercio mundial se recuperó más rápidamente que la producción, el crecimiento fue inferior a la mitad de la tasa media registrada en el decenio de 1990. Las tasas medias anuales de crecimiento ocultan la fuerte disminución del comercio mundial durante el año 2001 y su rápida recuperación entre el último trimestre de 2001 y el tercer trimestre de 2002. En el cuarto trimestre de 2002 se registró una notable estabilización del crecimiento del comercio tanto en los Estados Unidos como en Europa Occidental.

Un elemento importante de la expansión más moderada del comercio en el último trimestre de 2002 fue la persistencia de la atonía de la inversión en los principales mercados desarrollados y de América Latina. La contracción de las nuevas inversiones en maquinaria y equipo, que se mantuvo en 2002, puede relacionarse con las bajas tasas de utilización de la capacidad en el sector manufacturero y, en particular, en equipos de telecomunicaciones y de tecnología de la información. Siguieron disminuyendo los gastos mundiales en equipo electrónico, equipo físico de TI y material de fabricación de semiconductores.(3) La continua disminución del volumen de las importaciones de bienes de capital de los Estados Unidos en 2002, mientras que sus importaciones de todos los demás productos experimentaban una recuperación del 6 por ciento, pone de manifiesto las repercusiones del descenso de los gastos de inversión en las corrientes comerciales.(4)

  
Gráfico 2
Recuperación del comercio comparativamente a la de la producción en 2002
(Variación porcentual anual)

Debido en gran parte a la atonía de los gastos de inversión, la expansión del comercio (el promedio de las exportaciones más las importaciones) en América del Norte y Europa Occidental fue a la zaga del crecimiento de su PIB.  Sin embargo, en Asia y en las economías en transición el volumen del comercio creció a un ritmo por lo menos dos veces más rápido que la producción, muy superior en ambos casos a la media mundial.  La pujanza del crecimiento del comercio de esas regiones, que giró en torno al 10 por ciento en 2002, fue en gran parte resultado de la vigorosa expansión de la demanda interna o intrarregional.  Los resultados obtenidos por esas dos regiones explican por qué el comercio mundial aumentó más rápidamente que la producción en 2002.  En cambio, el descenso de la producción en América Latina originó una disminución de sus importaciones del orden del 6 por ciento, mientras que las exportaciones continuaron aumentando a pesar de la contracción del comercio intrarregional debido a la expansión del comercio con los países no pertenecientes a la región.  En conjunto, el comercio y la producción disminuyeron en América Latina, aunque la disminución del comercio fue más pronunciada que la de la producción.

El principal elemento de la recuperación del comercio mundial en el pasado año fue América del Norte y, en particular, el crecimiento de las importaciones de los Estados Unidos.  Las importaciones de mercancías de los Estados Unidos representaron una quinta parte del comercio mundial, pero el incremento en 2002 fue equivalente a la mitad de la expansión del comercio mundial.  El crecimiento relativamente vigoroso del consumo público y privado siguió alimentando la demanda de importaciones de los Estados Unidos.  Los países en desarrollo de Asia y las economías en transición, que fueron las regiones con el más alto crecimiento del PIB, también contribuyeron en gran medida al aumento de las importaciones.  Las importaciones de los países en desarrollo de Asia crecieron un 12,5 por ciento después de la contracción experimentada en el año anterior.  Para explicar este radical cambio de situación cabe señalar dos factores.  En primer lugar, el aumento de las entradas de IED a raíz de la adhesión de China a la OMC tuvo como resultado el súbito incremento en casi un 25 por ciento de las importaciones reales de China.  Y el segundo factor fue la recuperación de las importaciones de los países en desarrollo comerciantes en tecnología de la información de Asia Oriental en casi el 9 por ciento (después de la disminución del 8,5 por ciento registrada el año anterior).  En lo que se refiere a las economías en transición, la pujanza del comercio fue consecuencia en su mayor parte de la contribución de la demanda rusa, aunque la fortaleza de las importaciones fue general puesto que más de la mitad de las economías en transición registraron un crecimiento de 2 dígitos.

La recuperación del comercio mundial fue retrasada por el estancamiento de las importaciones de Europa Occidental y el descenso de las importaciones de América Latina. Entre los países de Europa Occidental, las importaciones disminuyeron o se estancaron en Francia, Alemania, España y Suiza. Sin embargo, algunas economías de Europa Occidental más pequeñas, como Bélgica, Dinamarca, Irlanda y Finlandia, registraron un aumento de las importaciones relativamente vigoroso. Una contracción de las entradas netas de capital en América Latina forzaron a la región a reducir su déficit por cuenta corriente. Esto se logró principalmente mediante una disminución de las importaciones del orden del 5 por ciento y un aumento de las exportaciones extrarregionales.

  
Gráfico 3
Grandes variaciones del crecimiento del volumen del comercio por regiones en 2002
(Variación porcentual anual)

  
Las variaciones de los precios y los tipos de cambio contribuyeron al aumento del valor del comercio mundial

La recuperación del volumen del comercio junto con un incremento moderado de los precios de las mercancías objeto de comercio internacional tuvieron por resultado un aumento del valor del comercio mundial. Las exportaciones de mercancías y de servicios comerciales aumentaron en un 4 por ciento y un 5 por ciento, respectivamente, en 2002. Sin embargo, esas tasas nominales de crecimiento del comercio continuaron siendo inferiores al promedio registrado en el decenio de 1990. En el caso del comercio de mercancías, la expansión registrada en 2002 compensó la disminución anunciada el año anterior, mientras que el comercio de servicios comerciales alcanzó un nuevo nivel máximo. En cuanto a las exportaciones mundiales de mercancías, los datos de que se dispone apuntan a un aumento superior a la media de las exportaciones de productos manufacturados y un incremento inferior a la media en lo que se refiere a los productos de la minería y los productos agropecuarios. Entre las categorías de servicios comerciales, las exportaciones de la categoría más amplia, otros servicios comerciales, registró una expansión considerablemente más rápida que la de los servicios de transporte y de viajes.

Cuadro 1.
Exportaciones mundiales de mercancías y servicios comerciales,
1990-2002

(En miles de millones de dólares y porcentajes)

 

Valor

 En porcentaje

  2002 1990–2000 2001 2002
Mercancías 6 240 6 –4 4
Servicios comerciales 1 540 7 –1 5

  
Como la inflación y los tipos de cambio evolucionaron de manera muy distinta según las regiones, la evolución del comercio de mercancías en términos nominales es diferente de la evolución en lo que respecta al volumen. Esto es particularmente evidente en el caso de Europa Occidental, cuyas exportaciones expresadas en volumen se estancaron en un 0,6 por ciento mientras que sus exportaciones expresadas en términos de valor aumentaron en un 5,5 por ciento. La diferencia se puede atribuir casi totalmente a la depreciación del 5 por ciento del dólar frente al euro y otras monedas de Europa Occidental. Asia y las economías en transición registraron el mayor crecimiento del valor de las exportaciones de todas las regiones, seguidas por Europa Occidental. América del Norte comunicó la mayor contracción de las exportaciones de las regiones mientras que las importaciones se recuperaron en un 1,7 por ciento. El crecimiento de 2 dígitos de las importaciones de las economías en transición contrasta con la contracción de las importaciones de América Latina, la peor de todas las regiones, que fue del 6,7 por ciento. Las exportaciones de América Latina aumentaron moderadamente a pesar de una fuerte disminución de su comercio intrarregional, que fue equilibrada por un incremento de los envíos a otras zonas. Las exportaciones e importaciones de África registraron pequeños aumentos. Se estima que las exportaciones de Oriente Medio han disminuido aún más en 2002 aunque a una tasa inferior a la registrada en 2001. Como las importaciones de la región continuaron aumentando, el gran excedente comercial del Oriente Medio se redujo un poco.

Evolución del comercio por regiones

Un aspecto destacado del comercio de América del Norte en 2002 fue los pobres resultados de sus exportaciones de mercancías, que disminuyeron un 4 por ciento. Una de las principales causas de ello fue la disminución de la demanda de algunos de sus socios comerciales más importantes porque sus economías apenas crecían, como en el caso de Europa Occidental y el Japón, o se hallaban en franca contracción, como en América Latina. La falta de competitividad de los precios quizás desempeñase también un papel importante ya que la disminución de las exportaciones de los Estados Unidos afectó incluso a las destinadas a regiones cuyas importaciones registraron un fuerte crecimiento. Las exportaciones de los Estados Unidos perdieron cuota de mercado no sólo en los países en desarrollo de Asia, las economías en transición, Europa Occidental y TLCAN, sino también en las economías en desarrollo de América Latina, Oriente Medio y África. Con todo, las importaciones siguieron creciendo impulsadas por el gasto de consumo, que se mantuvo, y una política fiscal cada vez más expansiva. El gasto de consumo, especialmente en bienes duraderos, se mantuvo pujante a causa de la baja inflación, la desgravación fiscal y la fortaleza del mercado de la vivienda de los Estados Unidos, que compensó parcialmente las pérdidas del mercado de valores. Los precios de importación y exportación de América del Norte disminuyeron ligeramente en 2002 y contribuyeron a la atonía del crecimiento del valor del comercio de mercancías. Por otra parte, el comercio de servicios comerciales registró mejores resultados, ya que las exportaciones aumentaron un 3 por ciento y las importaciones un 11 por ciento.(5) También en este caso hubo grandes diferencias en los resultados de los tres principales sectores de servicios. Mientras que los de los servicios de viajes y de transporte disminuyeron, los de otros servicios registraron un aumento de 2 dígitos de las importaciones y las exportaciones.

El comercio entre los países de América del Norte disminuyó ligeramente, mientras que el descenso de las exportaciones hacia América del Sur, dominada por la crisis, y las economías estancadas de Europa Occidental fue de 2 dígitos. Sin embargo, las importaciones procedentes de esas regiones aumentaron ligeramente en 2002. Las importaciones procedentes de Asia aumentaron debido en gran parte al incremento de los envíos de China. Las importaciones de los Estados Unidos procedentes de China se incrementaron en un 22 por ciento, pero las procedentes del Japón y los NPI (4) disminuyeron. La marcada caída de las exportaciones e importaciones de los Estados Unidos procedentes del Japón, Hong Kong, China y Singapur apunta a cambios estructurales en el comercio de los Estados Unidos con los países asiáticos. Por primera vez, China sustituyó al Japón como principal proveedor asiático de mercancías de los Estados Unidos. Aunque las exportaciones de los Estados Unidos destinadas a China también aumentaron rápidamente, el déficit comercial bilateral se amplió bruscamente hasta alcanzar casi 103.000 millones de dólares EE.UU., el más importante con cualquier país.

Por lo que respecta a la región de América Latina, el año 2002 resultó ser uno de los años más difíciles desde la crisis de la deuda del decenio de 1980. Las entradas netas de capital privado en la región, que rebasaron los 60.000 millones de dólares EE.UU. en 1999 y 2000, financiaron grandes déficit por cuenta corriente y apoyaron la actividad económica, las inversiones y las importaciones. Pero la pérdida de confianza de los inversores extranjeros en la sostenibilidad de las políticas económicas de algunos de los principales países de la región dio lugar a una reducción de las entradas netas de capital en la región. El descenso de las entradas fue compensado en un principio por una reducción de las reservas de divisas y, llegado el caso, por devaluaciones de entre el 50 y el 70 por ciento en los países más afectados. (A principios de enero de 2002, la Argentina decidió abandonar el vínculo de paridad entre el peso argentino y el dólar de los Estados Unidos establecido 10 años antes y devaluó el peso en un 30 por ciento. Esta decisión desencadenó una serie de devaluaciones en la región.) El nivel de muchos precios de productos básicos, que siguió siendo bajo en 2002, limitó los ingresos de exportación de muchos países de la región mientras que la enorme contracción de la actividad económica reducía considerablemente las importaciones.

La crisis financiera de la Argentina, las repercusiones económicas en sus vecinos del MERCOSUR y la discordia civil en Venezuela fueron los principales factores que contribuyeron a la disminución de las importaciones de mercancías de América Latina que ascendió a casi un 7 por ciento en 2002. La Argentina experimentó una reducción masiva de las importaciones (-55 por ciento), que excedió incluso a la peor contracción de las importaciones durante la crisis financiera asiática. La reducción de las importaciones de América Latina fue la más importante de las siete principales regiones abarcadas y contrasta con sus resultados comerciales en el decenio de 1990, cuando las importaciones y exportaciones de América Latina se incrementaron a un ritmo mucho más rápido que la media mundial. Las exportaciones de mercancías aumentaron ligeramente ya que el descenso del comercio intrarregional se vio compensado por el aumento de las exportaciones destinadas a otras regiones. Por primera vez desde 1991, la balanza de mercancías de América Latina (calculada sobre una base f.o.b.) volvió a ser positiva.  Se estima que las importaciones de servicios comerciales disminuyeron más del 10 por ciento en 2002.  A diferencia de las exportaciones de mercancías, las exportaciones de servicios comerciales de la región registraron una contracción del 6 por ciento, aproximadamente.

  
Gráfico 4
Evolución divergente del comercio de mercancías de MERCOSUR, en 2002
(En miles de millones de dólares)

  
Los países signatarios del MERCOSUR incrementaron sus exportaciones totales en un 1 por ciento, ya que la espectacular disminución en un tercio del comercio intrarregional fue compensada por un incremento del 5 por ciento de los envíos a todos los demás destinos. El Brasil, el país menos dependiente del comercio entre los signatarios del MERCOSUR, incrementó sus exportaciones totales de mercancías en un 4 por ciento. Ya en 2000, el comercio entre signatarios del MERCOSUR representaba aproximadamente una quinta parte de las exportaciones e importaciones totales. Pero dadas las enormes dificultades económicas experimentadas por la región en los últimos años, esa cuota disminuyó bastante abruptamente. En la actualidad, la cuota del comercio entre signatarios del MERCOSUR se ha reducido a casi la mitad (del 20 al 11 por ciento) en el caso de las exportaciones.

Las exportaciones de mercancías de América Latina aumentaron ligeramente ya que el descenso del comercio intrarregional fue equilibrado por un aumento de los envíos a otras regiones. La recuperación de los precios de los productos básicos durante el año y el repunte de la economía de los Estados Unidos contribuyeron a ese aumento. Aunque la mayoría de los países latinoamericanos registraron una reducción o un estancamiento de sus importaciones, las de Costa Rica se incrementaron en un 9 por ciento. México se benefició de la recuperación del mercado de los Estados Unidos, mientras que en el caso de Costa Rica la recuperación de los envíos de semiconductores impulsó tanto las importaciones como las exportaciones. A pesar de que los precios de muchos productos primarios continuaron siendo bajos, las exportaciones de muchos países de Centroamérica y el Caribe experimentaron una fuerte recuperación.

La actividad económica en Europa Occidental siguió decaída puesto que la demanda interna de Alemania, la economía más importante de la región, se hallaba en declive y varios otros países se enfrentaban a la atonía de su demanda interna. En la eurozona, el consumo público fue la categoría de gasto más dinámica, mientras que el consumo privado disminuyó y la inversión fija del sector empresarial cayó a casi el 3 por ciento.

Como el dólar de los Estados Unidos se había depreciado en un 5 por ciento, aproximadamente, con respecto al euro, la libra esterlina y varias otras monedas europeas, los resultados comerciales de Europa Occidental, expresados en dólares, ocultaban el estancamiento del volumen del comercio. Las exportaciones de mercancías de Europa Occidental, expresadas en dólares, aumentaron un 5,5 por ciento, mientras que el incremento de las importaciones fue sólo del 3,5 por ciento. Las importaciones de la Unión Europea procedentes de terceros países declinaron en tanto que el comercio intrarregional aumentó un 4,5 por ciento. La parte más dinámica del comercio de la Unión Europea fueron las exportaciones a terceros países, que se incrementaron en un 6 por ciento, aproximadamente. Entre los demás países de Europa Occidental, las exportaciones de mercancías de Suiza aumentaron un 7 por ciento debido en gran parte a la apreciación del franco suizo. El estancamiento de la economía suiza hizo que sus importaciones no variaran respecto del año anterior. Las importaciones de Turquía experimentaron en 2002 una fuerte recuperación de la contracción registrada el año anterior, mientras que el incremento de las exportaciones siguió siendo de 2 dígitos.

Las exportaciones de servicios comerciales de Europa Occidental, que representan casi la mitad del comercio de servicios mundial, aumentaron cerca de un 8 por ciento, algo más rápidamente que las importaciones, pudiéndose atribuir la mayor parte de ese incremento, expresado en dólares, a las variaciones del tipo de cambio. Las exportaciones de servicios de transporte experimentaron el crecimiento más débil, en tanto que las exportaciones de otros servicios comerciales lograron los resultados más dinámicos en 2002.

Más de un decenio después de la caída del muro de Berlín y la disolución de la URSS, las economías en transición se esfuerzan todavía por lograr su transformación de economías de planificación centralizada en economías de mercado. Una de las características más destacadas del proceso de transición ha sido la masiva reorientación de las corrientes comerciales del ámbito regional hacia los países exteriores a la región y, en particular, hacia Europa Occidental. Este cambio de estructura puede observarse no sólo en el comercio de Europa Central y Oriental o los Estados Bálticos sino también en los países de la Comunidad de Estados Independientes (CEI). A pesar del crecimiento económico relativamente pujante de la región, la parte correspondiente al comercio intrarregional en las exportaciones e importaciones de mercancías de la CEI disminuyó hasta un tercio y un quinto, respectivamente.

El importante crecimiento de la demanda interna, sobre todo del consumo privado, y el aumento de las entradas de IED en Europa Central y Oriental sostuvieron el comercio de mercancías de las economías en transición. Las importaciones de mercancías y servicios comerciales de la región registraron un aumento de 2 dígitos. El crecimiento de las exportaciones fue algo menos dinámico que el de las importaciones pero todavía fue dos veces más rápido que el del comercio mundial de mercancías y servicios comerciales.

Las exportaciones de mercancías de las economías en transición aumentaron un 8 por ciento, alcanzando un nuevo nivel sin precedentes de 310.000 millones de dólares EE.UU. en 2002. La Federación de Rusia, el país con mayor volumen de comercio de la región, registró un aumento de las exportaciones de mercancías del 3,5 por ciento, mientras que 14 otras economías en transición registraron un incremento de las importaciones de más del 10 por ciento. Los datos preliminares indican que las exportaciones e importaciones de servicios comerciales de las economías en transición aumentaron aproximadamente un 8 y un 12 por ciento, respectivamente, en 2002.

Los datos preliminares disponibles sobre la producción y el comercio de África en 2002 no indican una inversión de las tendencias anteriores con respecto a los ingresos o la participación en el comercio mundial. Los niveles medios de la renta por habitante variaron poco y el crecimiento del comercio de África fue a la zaga de la expansión del comercio mundial. Aunque mejoraron diversos indicadores de la deuda y los precios de los productos básicos distintos del petróleo experimentaron cierta recuperación respecto de sus bajos niveles de 2001, no se ha producido todavía una expansión generalizada de la producción y el comercio.

En 2002, el comercio de mercancías y servicios comerciales de África fue a la zaga del crecimiento del comercio mundial.(6) Las exportaciones e importaciones de mercancías registraron sólo pequeños aumentos. Los exportadores africanos de petróleo experimentaron una nueva disminución de sus exportaciones (-3 por ciento) y una reducción de sus importaciones del orden del 5 al 10 por ciento. Las exportaciones e importaciones del África Meridional se recuperaron entre un 2 y un 3 por ciento con respecto al descenso del año anterior. El aumento de las exportaciones de los demás países africanos no exportadores de petróleo fue probablemente mucho mayor y se situó en torno al 6 por ciento. El crecimiento de las exportaciones de los países africanos no exportadores de petróleo puede atribuirse en su mayor parte al fuerte repunte de las exportaciones que varios países (entre otros Marruecos, Egipto, Côte d'Ivoire y Ghana) experimentaron en 2002 con respecto a la disminución del año anterior. Sin embargo, se estima que sólo 6 de los 53 países africanos lograron un aumento sostenido de sus exportaciones en el período 1999-2002.(7) El aumento global de las importaciones de mercancías de África fue refrenado por la disminución de las importaciones de Nigeria y Egipto, que en 2001 habían sido el tercero y el segundo principal importador de mercancías de África. Sin embargo, en otros 15 países africanos, por lo menos, el aumento de las importaciones fue de 2 dígitos.

  
Cuadro 2.
Crecimiento del valor del comercio de mercancías por regiones,
1990-2002

(En miles de millones de dólares y porcentajes)

  Exportaciones Importaciones
  Valor Variación porcentual anual Valor Variación porcentual anual
  2002 1990–2000 2001 2002 2002 1990–2000 2001 2002

Mundo

6 240 6 –4 4 6 501 6 –4 3
 

América del Norte

946 7 –7 –4 1 431 9 –6 2

Estados Unidos

694 7 –7 –5 1 202 9 –6 2
 

América Latina

351 9 -3 1 355 12 -2 -7

México

161 15 -5 1 176 15 -4 0

MERCOSUR

88 6 4 1 62 12 -6 -26

Resto de América Latina

102 6 -7 0 116 7 3 -3
 

Europa Occidental

2 648 4 0 5 2 644 4 -2 4

Unión Europea (15)

2 441 4 0 5 2 438 4 -2 3

Excluido el comercio entre miembros de la UE

939 5 1 6 931 5 -4 1

Comercio entre miembros de la UE

1 502 4 -1 5 1 507 4 -1 5
 

Economías en transición

309 10 5 8 297 8 11 10

Europa Central/Oriental

145 10 12 12 176 12 9 10

Federación de Rusia

107 - -2 4 60 - 20 12

 

África

139 3 -6 1 133 3 2 1

 

Oriente Medio

236 6 -7 -2 183 5 4 2

 

Asia

1 610 8 -9 8 1 457 8 -7 6

Japón

416 5 -16 3 336 5 -8 -4

Países en desarrollo de Asia

1 114 11 -7 10 1 033 9 -7 9

China

326 15 7 22 295 16 8 21

Países comerciantes en tecnología de la información (6) a

618 10 -13 7 561 9 -13 6

 

Pro memoria:

               

 Economías en desarrollo

1 841 9 -7 6 1 704 9 -4 4

Países menos adelantados

38 7 1 4 45 5 4 3

a Taipei Chino, República de Corea, Malasia, Filipinas, Singapur y Tailandia.

En 2002 el crecimiento del comercio y la producción del Oriente Medio fue frenado por el descenso de la producción de petróleo de la región y las crecientes tensiones políticas. Como los combustibles representan más de los tres cuartos de las exportaciones de mercancías de la región, una disminución de la producción de petróleo repercute inmediatamente en los ingresos de exportación. Un rasgo notable del comercio del Oriente Medio en los últimos años es la mayor orientación de sus exportaciones hacia Asia, a la que se destina más de la mitad de las exportaciones de combustible de la región.

El comercio de mercancías y servicios comerciales del Oriente Medio fue a la zaga del crecimiento del comercio mundial en 2002. Se estima que las exportaciones de mercancías de la región han disminuido sólo ligeramente a pesar de la reducción de las exportaciones de varios grandes exportadores de petróleo de la región. Ello se explica por el aumento de 2 dígitos de las exportaciones comunicado por varios países comerciantes más pequeños. El aumento de las tensiones en la región afectó adversamente a los ingresos por turismo, lo que llevó a un descenso general de las exportaciones comerciales de la región estimado en un 4 por ciento, aproximadamente. En Israel, tanto las exportaciones como las importaciones continuaron a niveles muy bajos.

En 2002, la evolución del comercio en Asia se caracterizó por la divergencia entre las pautas de crecimiento del Japón, que sigue siendo la economía más importante de Asia, y de China y la India, los dos países más poblados del mundo. La demanda interna del Japón experimentó un estancamiento, mientras que en China y la India continuó creciendo rápidamente. Los países de la ASEAN y otras economías de Asia Oriental también experimentaron un mayor crecimiento económico en 2002 frente al del año anterior, pero para la mayoría de ellos, la expansión fue inferior a las tasas de crecimiento logradas en los primeros años del decenio de 1990.

  
Cuadro 3.
Crecimiento del valor del comercio de servicios comerciales por regiones, 1990-2002
(En miles de millones de dólares y porcentajes)

 

Exportaciones  Importaciones

 

Valor

Variación porcentual anual

Valor

Variación porcentual anual

 

2002

1990–2000

2001

2002

2002

1990–2000

2001

2002

Mundo

1538 7 –1 5 1522 6 –1 5

 

América del Norte

304 7 –4 3 260 7 –5 11

Estados Unidos

268 7 –4 3 218 8 –5 13

 

América Latina

55 7 –2 –6 63 7 0 –12

México

13 7 –7 0 16 5 –1 –1

MERCOSUR

13 8 –5 –13 19 10 –3 –26

Resto de América Latina

30 7 1 –5 28 7 3 –6
 

Europa Occidental

744 5 1 7 695 5 2 6

Unión Europea (15)

673 5 2 8 651 6 3 6

 

Economías en transición

58                  … 7 8 63                  … 11 12

Europa Central/Oriental

33                  … 6 3 29                  … 7 12

Federación de Rusia

12                  … 10 18 21                  … 12 13
 

África

29 5 1 –6 40 4 4 1
 

Oriente Medio

32 9 –7 –4 47 4 –6 3
 

Asia

316 9 –1 5 354 7 –4 1

Japón

65 5 –7 2 105 3 –7 –2

Países en desarrollo de Asia

230 11 2 6 227 11 –1 2

China

37 18 9 13 44 24 9 13

Hong Kong, China

44 8 2 6 24 8 –1 –2

Corea, Rep. de

29 13 0 –1 34 13 0 2

Singapur

27 8 –2 3 21 10 –6 1
 

Pro memoria:

 

 

 

 

 

 

 

 

Países en desarrollo

346 9 0 2 377 8 –1 –1

Países menos adelantados

6 6 –4 5 16 4 13 4

El comercio de mercancías de Asia registró una fuerte recuperación en 2002, aunque el nivel del comercio siguió siendo inferior al de 2000. El comercio de servicios comerciales fue menos dinámico que el comercio de mercancías en 2002, con un incremento de las exportaciones del 5 por ciento mientras que las importaciones aumentaron sólo ligeramente. Si bien el fin del auge de la tecnología de la información fue el factor más importante que originó la brusca caída de las exportaciones de Asia en 2001, los moderados aumentos de la producción en este sector fueron un elemento importante de la recuperación en 2002. Las seis economías asiáticas con una proporción elevada de productos electrónicos en sus exportaciones se beneficiaron de la recuperación del sector de la tecnología de la información. Sin embargo, el repunte de sus exportaciones e importaciones, que fue del 6 por ciento, aproximadamente, no resultó ser suficiente para compensar íntegramente la grave contracción experimentada en 2001.

El comercio del Japón en 2002 se distinguió por dos características principales. La debilidad de la demanda interna y la depreciación media anual del yen frente al dólar de los Estados Unidos favoreció el crecimiento de las exportaciones por encima de las importaciones y condujo a una disminución de los precios en dólares de las exportaciones y las importaciones. Por consiguiente, la recuperación del valor en dólares de las exportaciones de mercancías del Japón fue sólo del 3 por ciento y las importaciones disminuyeron nuevamente cerca de un 4 por ciento. La segunda característica destacada del comercio del Japón en 2002 fue el marcado aumento de sus corrientes bilaterales con China. Las exportaciones del Japón a China aumentaron en un 20 por ciento, mientras que sus importaciones lo hicieron en un 7 por ciento. El año pasado, China sustituyó a los Estados Unidos como proveedor de mercancías más importante del Japón.

El crecimiento de las exportaciones e importaciones de China experimentó una marcada aceleración durante el año. En 2002 en su conjunto, las exportaciones e importaciones de mercancías aumentaron más del 20 por ciento, mientras que en el cuarto trimestre de 2002 el valor del comercio superó en un tercio el del período correspondiente de 2001. El auge del comercio de China se puede atribuir en gran parte a las corrientes de inversiones sin precedentes registradas en 2002, que antes estaban destinadas principalmente a su sector de exportación. La liberalización del comercio en el sector del automóvil ocasionó una disminución de los precios internos lo que contribuyó a un gran incremento de la demanda de turismos, un aumento de las importaciones de productos de la industria del automóvil (un incremento del 40 por ciento en lo que respecta al valor) junto con un enorme incremento de la producción interna. Por lo que respecta al comercio en la esfera de la agricultura, las exportaciones de productos agropecuarios de China aumentaron (en valor) en un 13 por ciento, más rápidamente que sus importaciones, que lo hicieron en un 8,5 por ciento. En muchos sentidos, el ímpetu del dominio de China en Asia continuó el pasado año como resultado de su crecimiento, que siguió siendo alto, el incremento de las corrientes de IED y la excepcional expansión de su comercio. La expansión del comercio de China representó el pasado año más de un quinto del incremento de las exportaciones (e importaciones) mundiales de mercancías. China se ha convertido, no sólo en un importante proveedor, sino también en un importante mercado para muchos países.(8) Después de superar al Reino Unido en 2002, China ocupa actualmente el quinto lugar en la clasificación de los principales exportadores e importadores en el comercio mundial de mercancías.

Otra característica interesante del comercio de Asia ha sido los resultados relativamente menos dinámicos de Singapur y Hong Kong, China en los últimos años. Ello puede atribuirse a dos factores, por lo menos. En primer lugar, tanto Singapur como Hong Kong, China se han convertido en economías de renta alta que han perdido su ventaja competitiva en muchas de sus exportaciones tradicionales de manufacturas y, por lo tanto, han desviado sus estrategias de desarrollo económico al sector de los servicios. A raíz de una disminución de 2 dígitos en 2001, las exportaciones de productos nacionales de Hong Kong, China experimentaron una contracción del 18 por ciento, mientras que las de Singapur se recuperaron en sólo un 1,5 por ciento. En segundo lugar, dentro del sector de servicios, la posición de esas economías como centros regionales de distribución/tránsito está siendo impugnada por sus vecinos.

Perspectivas para 2003

En el momento de la elaboración del presente informe (abril de 2003) la guerra en Oriente Medio ensombrece las perspectivas a corto plazo de la economía mundial. Las proyecciones del curso del comercio y la producción mundiales depende en gran parte de la evolución del conflicto en el Iraq. Incluso en el supuesto más favorable de una guerra corta, mucho dependerá de la rapidez con que la estabilidad política pueda restablecerse en el Iraq y mantenerse en toda la región. En este supuesto más favorable para la economía mundial, cabe esperar una disminución de los precios del petróleo de su actual nivel de crisis de 33 dólares por barril, lo que serviría de estímulo a la actividad económica mundial.

Las repercusiones de un conflicto militar en el Oriente Medio también puede suponer para las relaciones internacionales un desafío que va más lejos que las cuestiones de suministros de petróleo y estabilidad regional. La intervención militar podría tener por efecto poner a prueba todo el sistema de acuerdos e instituciones internacionales, que hasta ahora han servido de base a la gobernanza mundial, y abrir paso a una nueva y más insegura era de las relaciones internacionales.(9) La erosión de la confianza en las instituciones mundiales podría alentar la creación de bloques con ideas afines y políticas egoístas.

La desaceleración de la expansión económica de las economías industriales observada en el último trimestre de 2002, la continua atonía de la confianza empresarial y de los consumidores de los primeros meses de 2003, reflejada también en la debilidad de los mercados de valores, junto con unos precios del petróleo más altos requieren que se rebajen las proyecciones económicas realizadas a finales de 2002 en las que se preveía una aceleración moderada del crecimiento de la producción mundial y un aumento anual significativo del comercio mundial. En vista de la evolución reciente de los tipos de cambio -en particular la fuerte apreciación del euro y el yen frente al dólar de los Estados Unidos- las proyecciones de crecimiento tienen que ser recortadas en el caso de la Unión Europea y el Japón y mejoradas en el de los Estados Unidos, con lo que se ampliará aún más la diferencia prevista del crecimiento de la demanda entre esas economías.

Las proyecciones arrojan un aumento de las corrientes comerciales mundiales de menos del 3 por ciento en 2003. En el supuesto de que el crecimiento del comercio siga siendo débil pero positivo en el primer trimestre de 2003 y de que se recupere a una tasa moderada después -a medida que se consolida en todo el mundo la actividad económica- se prevé un aumento interanual de entre el 2 y el 3 por ciento. Esa tasa de crecimiento del comercio sería inferior a la tasa media registrada en el decenio de 1990.

En el sitio Web de la OMC
> Comunicado de prensa del año pasado (2 de mayo de 2002):
El comercio se recuperará ligeramente en 2002 tras el fuerte descenso registrado en 2001
> Comunicado de prensa sobre las Estadísticas del Comercio Internacional más recientes (7 de octubre de 2002)
Supachai: El carácter decepcionante de las cifras comerciales subraya la importancia de acelerar las negociaciones comerciales
> Pasarela de las estadísticas del comercio
> Estudios y análisis económicos de la OMC
 

Apéndice - Cuadro 1.
Principales exportadores e importadores en el comercio mundial de mercancías, 2002
(En miles de millones de dólares y porcentaje)

Orden

Exportadores

 Valor

Parte porcen-tual

Variación porcen-tual anual

Orden

Importadores

 Valor

Parte porcen-tual

Variación porcen-tual anual

1

Estados Unidos

693,5

10,8

-5

1

Estados Unidos

1 202,5

18,0

2

2

Alemania

612,2

9,5

7

2

Alemania

493,3

7,4

1

3

Japón

416,0

6,5

3

3

Reino Unido

339,8

5,1

2

4

Francia

329,5

5,1

2

4

Japón

336,4

5,0

-4

5

China

325,6

5,1

22

5

Francia

326,4

4,9

-1

6

Reino Unido

275,9

4,3

1

6

China

295,2

4,4

21

7

Canadá

252,5

3,9

-3

7

Italia

241,1

3,6

4

8

Italia

252,0

3,9

5

8

Canadá

227,6

3,4

0

9

Países Bajos

243,4

3,8

5

9

Países Bajos

217,7

3,3

4

10

Bélgica

213,2

3,3

12

10

Hong Kong, China

208,6

3,1

3

 

 

 

 

 

 

 importaciones definitivas a

24,7

0,4

-21

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

11

Hong Kong, China

200,6

3,1

5

11

Bélgica

195,7

2,9

10

 

 exportaciones nacionales

16,7

0,3

-18

12

México

176,5

2,6

0

 

 reexportaciones

183,9

2,9

8

13

España

153,7

2,3

-1

12

Corea, Rep. de

162,5

2,5

8

14

Corea, Rep. de

152,1

2,3

8

13

México

160,8

2,5

1

15

Singapur

116,2

1,7

0

14

Taipei Chino

130,3

2,0

6

 

 importaciones definitivas

57,7

0,9

-5

15

Singapur

125,6

2,0

3

16

Taipei Chino

112,6

1,7

5

 

 exportaciones nacionales

67,0

1,0

1

17

Suiza

83,5

1,2

-1

 

 reexportaciones

58,6

0,9

5

18

Malasia

80,2

1,2

9

16

España

118,9

1,9

2

19

Austria

77,7

1,2

4

17

Fed. de Rusia

106,9

1,7

4

20

Australia

72,7

1,1

14

18

Malasia

95,7

1,5

9

 

 

 

 

 

19

Irlanda

88,6

1,4

7

 

 

 

 

 

20

Suiza

87,6

1,4

7

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

21

Suecia

80,7

1,3

7

21

Suecia

65,9

1,0

4

22

Austria

79,1

1,2

12

22

Tailandia

64,5

1,0

4

23

Arabia Saudita

73,9

1,2

1

23

Fed. de Rusia

60,0

0,9

12

24

Tailandia

68,6

1,1

5

24

India

56,3

0,8

12

25

Australia

65,0

1,0

3

25

Polonia

54,8

0,8

9

26

Brasil

60,4

0,9

4

26

Irlanda

51,9

0,8

3

27

Noruega

60,3

0,9

2

27

Brasil

49,5

0,7

-15

28

Dinamarca

56,8

0,9

10

28

Dinamarca

49,2

0,7

9

29

Indonesia

52,0

0,8

0

29

Turquía

48,8

0,7

18

30

India

50,0

0,8

15

30

Rep. Checa b

40,6

0,6

11

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Total de los países enumerados c

5 538

86,2

-

 

Total de los países enumerados c

5 651

84,5

-

 

Mundo c

6 424

100,0

4

 

Mundo c

6 685

100,0

3

a Las importaciones definitivas se definen como importaciones menos reexportaciones.
b Las importaciones se valoran f.o.b.
c Incluye una cuantía significativa de reexportaciones o importaciones destinadas a la reexportación.

  
Apéndice - Cuadro 2.

Principales exportadores e importadores en el comercio mundial de servicios comerciales, 2002
(En miles de millones de dólares y porcentajes)

Orden Exportadores Valor Parte porcen-tual Variación porcentual anual Orden Importadores Valor Parte porcen-tual Variación porcentual anual

1

Estados Unidos

267,8

17,4

3

1

Estados Unidos

218,4

14,3

13

2

Reino Unido

121,0

7,9

10

2

Alemania

142,8

9,4

4

3

Alemania

94,9

6,2

14

3

Japón

105,3

6,9

-2

4

Francia

84,0

5,5

5

4

Reino Unido

98,0

6,4

6

5

Japón

64,7

4,2

2

5

Francia

64,3

4,2

4

6

España

61,1

4,0

6

6

Italia

61,7

4,0

11

7

Italia

58,7

3,8

3

7

Países Bajos

55,9

3,7

5

8

Países Bajos

54,7

3,6

5

8

Bélgica-Luxemburgo

47,9

3,1

12

9

Bélgica-Luxemburgo

53,3

3,5

9

9

China

44,2

2,9

 ...

10

Hong Kong, China

44,0

2,9

6

10

Canadá

41,7

2,7

0

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

11

China

37,3

2,4

 ...

11

Irlanda

38,8

2,5

12

12

Canadá

36,2

2,4

2

12

España

36,2

2,4

9

13

Austria

36,1

2,3

11

13

Corea, Rep. de

33,9

2,2

2

14

Corea, Rep. de

29,3

1,9

-1

14

Austria

33,8

2,2

8

15

Suiza

27,3

1,8

5

15

Dinamarca

24,6

1,6

5

16

Singapur

27,0

1,8

3

16

Taipei Chino

24,4

1,6

3

17

Dinamarca

26,9

1,8

0

17

Hong Kong, China

23,9

1,6

-2

18

Irlanda

26,2

1,7

31

18

Suecia

23,1

1,5

1

19

Suecia

22,0

1,4

1

19

Fed. de Rusia

20,7

1,4

13

20

Taipei Chino

21,3

1,4

10

20

Singapur

20,6

1,4

1

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

21

India

20,7

1,3

8

21

Australia

17,0

1,1

3

22

Grecia

18,9

1,2

-3

22

Noruega

16,5

1,1

8

23

Noruega

18,8

1,2

5

23

México

16,4

1,1

-1

24

Australia

16,0

1,0

1

24

Tailandia

16,3

1,1

13

25

Tailandia

14,9

1,0

16

25

Indonesia

15,7

1,0

...

26

Turquía

14,4

0,9

-10

26

Malasia

15,6

1,0

-5

27

Malasia

14,1

0,9

-2

27

India

15,5

1,0

-14

28

México

12,6

0,8

0

28

Suiza

15,3

1,0

1

29

Fed. de Rusia

12,4

0,8

18

29

Brasil

13,6

0,9

-14

30

Polonia

9,8

0,6

0

30

Israel

12,5

0,8

1

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Total de los países enumerados

1 345,0

87,5

6

 

Total de los países enumerados

1 315,0

86,4

6

 

Mundo

1 540,0

100,0

5

 

Mundo

1 520,0

100,0

5

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(1) A mediados de 2002, las tasas de utilización de capacidad en el sector manufacturero de los Estados Unidos, el Japón y la zona euro seguían situándose muy por debajo de las tasas de utilización medias registradas como promedio en el decenio de 1990. volver al texto
(2) Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) de las Naciones Unidas (2003). Balance preliminar de las economías de América Latina y el Caribe, 2002. volver al texto
(3) Según la industria, las ventas mundiales de equipo electrónico y equipo físico de TI disminuyeron en un 5 por ciento, aproximadamente, en tanto que las ventas de material de fabricación de semiconductores disminuyeron más del 20 por ciento en 2002. volver al texto
(4) Departamento de Comercio de los Estados Unidos, Commerce News FT-900-12, documento 11, página 16. volver al texto
(5) La mayoría de este aumento está relacionado con el incremento de las importaciones de servicios de seguros de los Estados Unidos que se recuperaron de las secuelas de los pagos de seguros hechos como consecuencia de los daños causados por los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001. volver al texto
(6) En el momento de redactar este informe (a comienzos de marzo de 2003) sólo cuatro países africanos han comunicado los datos anuales completos relativos a su comercio de mercancías. volver al texto
(7) Estos seis países son: Guinea Ecuatorial, Lesotho, Mozambique, Seychelles, Sierra Leona y Tanzanía. volver al texto
(8) China fue en 2001 el principal mercado de exportación de ocho países en desarrollo y el segundo mercado más importante para otros cinco. volver al texto
(9) Véase Martin Wolf, America may not like the new world it is about to create, Financial Times, 12 de marzo de 2003. volver al texto