Buenas tardes a todos. Muchas gracias por estar hoy aquí.

En 2013, hicimos algo que la OMC no había hecho nunca antes: logramos un nuevo acuerdo comercial multilateral, el Acuerdo sobre Facilitación del Comercio.

Fue un gran avance, que requirió mucho trabajo, flexibilidad, creatividad y voluntad política.

El Acuerdo quedó abierto a la ratificación en noviembre de 2014.

Esta mañana he recibido las ratificaciones de Rwanda, Omán, el Chad y Jordania, con lo que el número total de ratificaciones se eleva a 112.

Esto significa que hemos superado el umbral jurídico necesario, es decir, dos tercios de los Miembros de la OMC.

En consecuencia, me complace enormemente anunciarles que el Acuerdo sobre Facilitación del Comercio de la OMC ya ha entrado en vigor.

Se trata de una gran noticia.

Al ratificar el Acuerdo, los Miembros de la OMC han demostrado su compromiso con el sistema multilateral de comercio y han cumplido las promesas hechas en Bali cuando se selló este Acuerdo hace poco más de tres años.

Ahora que el Acuerdo ya está en vigor podemos empezar a trabajar para hacer realidad sus beneficios.

Como ustedes saben, la finalidad del Acuerdo es agilizar, simplificar y estandarizar los procedimientos aduaneros, y esto ayudará a reducir los costos del comercio en todo el mundo.

Se estima que la plena aplicación del Acuerdo podría reducir los costos del comercio a nivel mundial en alrededor del 14,3% en promedio.

La plena aplicación del Acuerdo beneficiará en particular a los países en desarrollo y menos adelantados, los cuales suelen tener costos del comercio más altos.

El Acuerdo ayudará a esos países a diversificar su comercio. Los países en desarrollo podrían aumentar un 20% el número de productos que exportan, y los PMA, hasta un 35%.

Además, los países en desarrollo podrían tener acceso, en promedio, a un tercio más de mercados extranjeros, y los PMA, a un 60% más, con lo que esos países serían menos vulnerables a las perturbaciones económicas externas.

Los efectos acumulativos son impresionantes. Para 2030 el Acuerdo podría suponer la adición de 2,7 puntos porcentuales por año al crecimiento del comercio mundial y más de 0,5 punto porcentual por año al crecimiento del PIB mundial. Estos efectos tendrían mayor repercusión que la eliminación de todos los aranceles existentes en el mundo.

El Acuerdo también es innovador por la forma en que se diseñó.

Da a los países en desarrollo y a los PMA flexibilidad para adaptar la aplicación de sus compromisos a sus necesidades específicas y a su nivel de desarrollo.

Además, el Acuerdo prevé el apoyo práctico necesario para ayudar a los Miembros en su puesta en aplicación. Estamos trabajando con varios Miembros y asociados donantes para movilizar ese apoyo.

Para llevar adelante esa labor y ayudar a poner en contacto a donantes y beneficiarios, pusimos en marcha el Mecanismo para el Acuerdo sobre Facilitación del Comercio de la OMC.

Tras la noticia de hoy -la entrada en vigor del Acuerdo- podemos elevar el apoyo que se está prestando a un nivel superior.

Quiero dar las gracias a todos los Miembros de la OMC que han ratificado el Acuerdo por habernos ayudado a alcanzar este logro histórico. También insto a los Miembros que aún no han ratificado el Acuerdo a que lo hagan cuanto antes para que también puedan beneficiarse de él.

El Acuerdo sobre Facilitación del Comercio es la reforma del comercio mundial más importante de este siglo.

Pone de relieve el poder del comercio para apoyar el empleo y el crecimiento, tanto en los países desarrollados como en los países en desarrollo.

Ahora, trabajando juntos, tenemos la responsabilidad de aplicar el Acuerdo y de hacer realidad esos beneficios.

Espero con ilusión trabajar con todos los Miembros en esa dirección.

Confío en que la noticia de hoy nos sirva de inspiración para lograr nuevos éxitos en el futuro inmediato.

Muchas gracias.