COVID-19

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El Presidente del Consejo General convocó la reunión tras semanas de consultas en que las delegaciones debatieron sobre la manera de avanzar. En esas conversaciones, los Miembros expresaron su opinión de que solo un resultado holístico, integral y equilibrado en relación con la respuesta de la OMC a la pandemia sería creíble. El Presidente añadió que las delegaciones habían expresado asimismo su voluntad y deseo de seguir trabajando en ese tema crucial con el objetivo de lograr resultados, y de hacerlo sin demora.

Las consultas pusieron de manifiesto la necesidad de seguir trabajando en el texto presentado a finales del año pasado por el ex Embajador de Nueva Zelandia, David Walker, que estaba facilitando las conversaciones que mantienen los Miembros de la OMC para encontrar una respuesta multilateral y horizontal a la pandemia de COVID-19. Los Miembros también llamaron la atención sobre las consultas de alto nivel que están llevando a cabo la Directora General Okonjo-Iweala y la Directora General Adjunta Anabel González con algunos Miembros destacados sobre los aspectos de la respuesta a la pandemia relacionados con la propiedad intelectual, que están siendo negociados por todos los Miembros en el Consejo de los ADPIC.

El Embajador Castillo dijo que la reunión que había convocado no debía interpretarse en modo alguno como un inicio desde cero. “Todos somos conscientes del enorme esfuerzo, el trabajo y las contribuciones que se hicieron el año pasado”, dijo, y pidió a los Miembros que aprovechasen y mejorasen los textos del Embajador Walker, así como sus propias propuestas.

El Presidente del Consejo General reconoció las diferencias que existían entre los Miembros de la OMC no solo sobre el fondo, sino también sobre la forma de hacer avanzar los debates. Varias delegaciones expresaron su interés en lograr la cuadratura del círculo con urgencia, mientras que otras se mostraron más cautelosas y dubitativas sobre la conveniencia de reanudar el diálogo de inmediato en este momento. El Presidente del Consejo General señaló que, a pesar de ello, creía que era posible encontrar un camino a seguir, y que las divergencias no debían impedir el progreso.

Instó a los Miembros a dar una oportunidad al proceso liderado por él: “Les pido que se comprometan a desarrollar, y no a frenar, lo que tenemos entre manos. Trabajemos juntos para ver cómo y en qué podemos mejorar. Para alcanzar un resultado aceptable, tendremos que estar dispuestos a hacer sacrificios. No parece que nos esperen días fáciles, pero sé que el sacrificio valdrá la pena”.

La Directora General Okonjo-Iweala dio las gracias a los Miembros por el “muy constructivo” debate en el que todas las delegaciones reconocieron la importancia que tenía para la credibilidad de la OMC acordar una respuesta significativa a la pandemia. Asimismo, señaló que las delegaciones eran conscientes de que ello exigía “un enfoque holístico que comprenda tanto los aspectos relacionados con la propiedad intelectual como los demás aspectos relacionados con el comercio por una razón muy lógica, y es que no se puede avanzar en unos sin avanzar en otros”.

Por lo que se refiere a los aspectos comerciales, la Directora General Okonjo-Iweala subrayó que la mayoría de las delegaciones consideran que, a pesar de las divergencias existentes, el texto del facilitador es la base para seguir adelante. Dijo que “con buena voluntad, quienes tengan dificultades con ello podrán hacer llegar su opinión y lograr que esto se resuelva”.

En cuanto a los debates en pequeños grupos sobre los aspectos de la respuesta a la pandemia relacionados con la propiedad intelectual, pidió paciencia a los Miembros. “Se trata de una cuestión muy difícil. Si fuera sencilla, ya se habría resuelto en los casi dos años que este debate se lleva celebrando (en el Consejo de los ADPIC). Este proceso en pequeños grupos … está en marcha, pero es extremadamente difícil. Tengo que decir que no hay un camino fácil”.

Para concluir, la Directora General Okonjo-Iweala dijo lo siguiente: “Debemos esforzarnos por obtener un resultado sobre esta cuestión para finales de febrero. Sería realmente triste que esta Organización siguiera hablando y debatiendo sobre esta pandemia, y que cuando demos una respuesta la gente ya no la considere pertinente. Creo que deberíamos actuar lo más rápido posible para intentar resolver esta cuestión para finales de febrero”. Esto se ajusta al calendario que ella y el Presidente del Consejo General habían descrito en una carta enviada a los Miembros en diciembre.

De cara al futuro, el Presidente del Consejo General dijo que tenía la intención de utilizar un “cóctel de enfoques”, convocando a las delegaciones en diversas configuraciones. Señaló que comenzaría en los próximos días celebrando una reunión con los coordinadores de los grupos y otras delegaciones en un formato de grupo representativo. “Permítanme reiterar que doy la máxima importancia a la transparencia y la inclusión en todas las etapas. Mi intención y la de la Directora General es que podamos tener un proyecto de texto mutuamente aceptable para finales de febrero”. 

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