WTO NOTICIAS: DISCURSOS — DG ROBERTO AZEVÊDO


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Buenos días,
Miembros del Órgano de Apelación, pasados y presentes,
Embajadores,
Distinguidos invitados,
Señoras y señores,

Es un placer para mí estar aquí hoy con todos ustedes para presentar esta publicación tan especial.

Es fantástico ver tantas caras conocidas. Tenemos entre nosotros, hoy, a muchos de los autores que han colaborado en este libro y a grandes personalidades de la comunidad internacional del comercio.

Raros son los acontecimientos que consiguen reunir tantos conocimientos y tanta experiencia.

Creo que este es un libro excepcional.

Narra la historia del estado de derecho en el sistema multilateral de comercio.

Muestra cómo se desarrolló y evolucionó en la época del GATT y en los 20 años de existencia de la OMC.

También creo que el libro nos muestra por qué nos sentimos tan orgullosos de nuestro actual sistema de solución de diferencias y por qué es tan importante reforzarlo y preservarlo.

Se suele considerar que el establecimiento de la OMC, en 1995, fue un hito muy importante en el derecho internacional. Por tanto, la conmemoración del vigésimo aniversario de la OMC es el momento ideal para analizar esta pieza fundamental de la labor que realizamos en Ginebra.

Las ventajas resultantes de nuestro trabajo en materia de solución de diferencias tienen un amplio alcance, aunque no siempre se aprecien de inmediato. Por ejemplo, además de su repercusión directa en las partes implicadas en las diferencias, creo que la solidez de la función de solución de diferencias también ha sido un factor crucial de la respuesta a la crisis financiera.

No basta con que haya normas. Estas normas deben hacerse cumplir, y gracias a la existencia de nuestro eficiente y eficaz sistema de solución de diferencias pudimos frenar ciertas tendencias proteccionistas que podían haber tenido consecuencias desastrosas en un período peligroso para la economía mundial.

De esta forma, y de otras muchas, a lo largo de los años los abogados y expertos de la OMC han prestado un gran servicio público a la comunidad mundial.

Han demostrado una y otra vez que la Organización puede sentirse orgullosa de ellos, y creo que este libro así lo demuestra.

Quiero aprovechar esta oportunidad para felicitar a todos los que han intervenido en su elaboración.

Quiero dar las gracias a los 40 funcionarios de la Secretaría, funcionarios públicos y Miembros del Órgano de Apelación, pasados y presentes, por sus fascinantes testimonios sobre la evolución del sistema internacional de comercio.

Gracias a todos ustedes, este libro ocupa un lugar único en la literatura de la OMC. Describe la naturaleza de la labor jurídica de la Organización desde el punto de vista de quienes participan en ella.

Entre los colaboradores hay algunas de las personalidades que participaron en la creación de la Organización para la que trabajamos actualmente.

Por supuesto, quiero rendir un especial homenaje a Gabrielle Marceau por sus incansables esfuerzos por coordinar este proyecto de principio a fin. Sin su ardua dedicación, este libro no se habría publicado.

A título personal, me complace ver que en el libro se reconoce la función que han desempeñado los no juristas. Dos de ellos, actualmente son Miembros del Órgano de Apelación.

Soy ingeniero de profesión. Me formaron para que me ocupara del funcionamiento interno de sistemas muy complejos, que nos benefician a todos, pero que nadie comprende. Así pues, trabajar en el sistema de solución de diferencias me resultó bastante familiar.

Me siento muy afortunado de haber representado al Brasil en los procedimientos de solución de diferencias durante varios años. También fui miembro de grupos especiales en diversas ocasiones. Por tanto, siento un profundo respeto por el sistema y por todos los que tanto se esfuerzan por mantenerlo.

El estado de derecho y el sistema de solución de diferencias son esenciales para todo lo que hacemos aquí en la OMC.

Así pues, por todas las razones que he indicado, recomiendo este libro a todos los que estén interesados en el derecho internacional o en el comercio internacional.

Debería servirnos de inspiración ante los apasionantes y formidables retos que nos esperan.

Lamento mucho no poder quedarme para escuchar las presentaciones y los debates que se van a celebrar hoy aquí, pero debo volver a las negociaciones sobre el programa de trabajo de las cuestiones restantes del PDD.

Confío en que, al propugnar este aspecto de nuestra labor, podremos escribir nuevos capítulos de la historia de esta Organización, ¡y proporcionarles material para la próxima edición de este libro!

Antes de irme, desearía hacer un breve anuncio.

Como saben, este acto forma parte de una serie de eventos organizados para conmemorar el vigésimo aniversario de la OMC.

Dentro de pocos días, el 14 de junio, celebraremos una Jornada de puertas abiertas para dar las gracias a los habitantes de Ginebra por acogernos de forma tan generosa y cortés desde hace 20 años. Este acto se llama "Merci Genève".

Será un día muy interesante y animado. Las delegaciones tendrán estands de todo tipo, en particular para dar a conocer su gastronomía nacional, y también habrá exposiciones y visitas guiadas. La Jornada va dirigida a toda la comunidad de Ginebra.

Les invito a que se unan a nosotros el 14 de junio en esta celebración única.

Pero, por ahora, felicidades una vez más por este excelente libro. Les deseo que la Conferencia sea un éxito.

Muchas gracias.

 

Publicacione del 20 aniversario

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